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Los mejores de la historia
Agencias
Pasan los años, llegan jóvenes tenistas pero, al final, los Grand Slams son cosa de dos: Novak Djokovic y Rafael Nadal que, retirado Roger Federer, continúan su batalla por ser el hombre con más grandes de la historia.
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La victoria del joven español Carlos Alcaraz en el Abierto de Estados Unidos y su ascenso al número uno mundial parecía anticipar un periodo de transición en la élite del tenis, copada durante dos décadas por el llamado Big Three.
Ausente Alcaraz por lesión, otros jóvenes veían la ventana abierta para levantar su primer Grand Slam: el griego Stefanos Tsitsipas, el noruego Casper Ruud, el italiano Jannik Sinner, el canadiense Felix Auger-Aliassime, el danés Holger Rune...
Rafael Nadal llegaba a Australia con una insólita racha de derrotas y Novak Djokovic veía amenazadas sus opciones por una lesión en el muslo izquierdo que a punto estuvo de retirarlo del torneo.
Nuevamente lesionado, Nadal cayó en segunda ronda. Pero Djokovic, después de una agonizante primera semana en que apenas podía correr, terminó levantando el domingo su décimo Abierto de Australia y su 22º Grand Slam, igualando el récord de su rival español.
“Hablamos de los jóvenes. Están aquí y es genial para el tenis y para el futuro del tenis. Pero todavía tienes a estos dos batallando”, dijo Goran Ivanisevic, el entrenador del serbio tras la victoria del domingo.