Fotografía: Telemundo

JORGE LUIS MORENO

EL LADO OSCURO QUE BRILLÓ: "DON NACHO", EL VILLANO INOLVIDABLE DE "LA JEFA"

La superserie de Telemundo La Jefa llegó a su final y, con él, uno de los personajes que más ha sacudido a la audiencia: Ignacio Perez, Don Nacho. Interpretado por el actor y productor mexicano Jorge Luis Moreno, este villano ha dejado una huella imborrable en la historia como uno de los principales antagonistas de Gloria Guzmán (Fabiola Guajardo). Su presencia perturbadora y decisiones extremas convirtieron a Don Nacho en una figura tan intrigante como detestable. En una entrevista exclusiva con Contacto Total, Jorge Luis Moreno nos ofreció una mirada íntima sobre el proceso detrás de este complejo personaje, su experiencia en la serie y lo que representa encarnar a un hombre tan obsesivo como leal.

Un personaje retorcido... y fascinante

“Cuando lees un guión con un personaje tan extravagante, tan obsesivo, tan trastornado... lo primero que piensas es: ¿cómo lo voy a hacer creíble?”, confesó Jorge Luis. La construcción de Don Nacho no fue sencilla. Más allá de los rasgos de villano, el reto fue abordarlo desde la interpretación sin caer en la caricatura. “La clave fue encontrar el juego en escena. No que sus acciones fueran divertidas, sino que él disfrutara de su locura, de su obsesión”, explicó.

Ese enfoque lúdico, propuesto por los directores Mauricio Corredor, Mauricio Menéndez y Laura Marcos, permitió que Moreno explorara las capas más profundas del personaje: “Había que entender que Don Nacho, en su mente distorsionada, actuaba por amor y lealtad”.

El lado humano del monstruo

Aunque resulta difícil verle virtudes a un personaje tan oscuro, Jorge Luis destaca un rasgo fundamental: su lealtad. “Es lo más rescatable de él. Es un tipo que creía firmemente en la fidelidad. Su amor por Gloria nace de esa devoción ciega, incluso infantil. Y lo mismo ocurre con su relación con El Duque. Para Nacho, la traición duele más que cualquier cosa.”

Pero como buen villano trágico, sus virtudes están contaminadas por sus propios demonios. “La serie lo deja claro: esa única virtud que tiene, también se ve corrompida por sus defectos”.

¿Villano adorado?

A pesar de lo detestable que puede parecer en pantalla, Don Nacho ha generado un fenómeno curioso entre los fans. “Es raro. Camino por la calle y de repente una niña se asoma de un carro y me grita: ‘¡Adiós, Don Nacho!’”, contó entre risas. Aunque bromea con la idea de que no es ideal que los niños vean a un personaje así, reconoce que ha recibido más cariño que críticas.

La química con Fabiola Guajardo

Aunque ya habían coincidido en “Buscando a Frida”, “La Jefa” fue el verdadero reencuentro entre Jorge Luis y Fabiola Guajardo. “La dinámica entre Nacho y Gloria necesitaba complicidad. La primera escena que hicimos juntos fue larguísima y muy intensa, y yo apenas estaba entrando en el personaje, pero Fabiola me ayudó a entrar en la dinámica”. Tiene un humor muy particular que me hizo entrar en el juego escénico necesario”. Esta conexión fue clave para lograr una relación en pantalla que es tan compleja como tensa, marcada por el control, la manipulación y el deseo obsesivo de Nacho.

¿Segunda temporada en camino?

Tras el final de la serie, la gran incógnita es si habrá segunda temporada de La Jefa. Jorge Luis dice no saber la respuesta pero la posibilidad queda abierta, aunque el actor se muestra tan intrigado como el público.

Más allá de La Jefa

Además de su participación en La Jefa, Jorge Luis Moreno continúa activo en otros proyectos. Próximamente debutará en teatro con la obra El Plan, dirigida por Mauricio Corredor y compartiendo escenario con otros actores de la serie, como Luis Ernesto Verdín y Mario Loria. El estreno está previsto para agosto en la Ciudad de México.

Entre risas y reflexiones, Jorge Luis cerró la entrevista con una confesión honesta: lo que más le cuesta de actuar es “cuando no hay trabajo”. Y aunque Don Nacho pueda ser odiado en la ficción, está claro que Jorge Luis Moreno es un actor que deja todo en cada papel, y que ha logrado convertir a un villano en uno de los grandes protagonistas de esta historia.