Semana de la visión 8 de Octubre - 15 de Octubre
36 millones de personas en todo el mundo padecen de ceguera.1 De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, cerca del 80% de ceguera en el mundo se puede evitar.2
Según estimaciones de la OMS, la producción global podría incrementarse en aproximada mente 271 mil millones de dólares estadouni denses si todos los pacientes con discapacidades visuales severas recibieran los lentes adecuados.3
El milagro de la visión Recibimos el 80% de nuestro aporte sensorial a través de nuestros ojos. Usamos nuestros ojos para reunir información. Podemos ver en las noches más oscuras y en la luz del sol brillante. Podemos distinguir entre 10 millones de tonos de colores y podemos ver cosas que están increíblemente lejos, como las estrellas en el cielo o las manchas más pequeñas. Nuestros ojos son nuestro órgano sensorial más poderoso. El milagro de la visión se basa en interacciones complejas entre el ojo, el nervio óptico y el cerebro. Los estímulos de luz en la retina se transmiten al nervio óptico, que envía la información directamente al cerebro. De esta manera podemos procesar unas 55 imágenes por segundo. Estos nos proporcionan información importante que nos permite ver, comprender y evaluar lo que está sucediendo en el mundo que nos rodea.
253 millones de personas en el mundo tienen discapacidades visuales. En otras palabras, sufren de una enfermedad ocular o tienen una discapacidad visual grave.4
Alrededor del 90% de estas personas viven en países en desarrollo con ingresos bajos a medios.1
Una buena salud visual Todos tienen su propio color de ojos y el rendimiento de sus ojos es igual de individual. Algunas personas siempre tienen una visión nítida, incluso de noche. Otros tienen dificultades para reconocer los colores correctamente y algunos tienen problemas para ver a todas las distancias. A veces, los dolores de cabeza y / o los ojos irritados o llorosos indican que hay un problema. Esto se debe a que nuestra visión generalmente cambia gradualmente, durante un largo período de tiempo. Desde los 40 a los 50 años, casi todos necesitan ayuda visual, ya que los lentes y los músculos del iris pierden su elasticidad a lo largo del tiempo. Incluso antes de eso, la vista de algunas personas se deteriora gradualmente sin siquiera notarlo. Los chequeos oportunos con un oftalmólogo u optómetra ayudan a identificar tales problemas en una etapa temprana, con el objetivo de ver lo mejor posible durante el mayor tiempo posible.