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REVIEW OF OPHTHALMOLOGY
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¿El implante intracorneal es una alternativa viable para su clínica? (Este artículo fue traducido, adaptado e impreso con autorización exclusiva del grupo de revistas de Review de Jobson Medical Information. Su producción está prohibida).
Kristine Brennan, editora jefe adjunta
Por ser fabricado con fluoruro de polivinilideno opaco, el implante KAMRA de pequeña abertura puede ser visible en ojos con iris de color claro
Los implantes intracorneales son intervenciones sencillas y definitivas, utilizadas para eliminar o reducir la dependencia a las gafas –y los inconvenientes que conllevan– de personas que padecen presbicia, cuya población se estima alcance a 1,37 mil millones en todo el mundo hasta el 2020, según un estudio publicado en 2008.1 Sin embargo, al conversar con cirujanos que acostumbran mantenerse bien informados, resulta evidente que sus colegas se han tomado su tiempo para adoptar esta nueva tecnología, como quedó demostrado, recientemente, por el cierre de los negocios de ReVision Optics, fabricante del implante Raindrop, actualmente fuera de producción. Entre los posibles obstáculos al éxito de los implantes están las diferencias individuales de cicatrización de los pacientes tras la intervención, problemas con la película lagrimal, así también como posibles efectos indeseables por el uso de esteroides tópicos en el posoperatorio.2 En esta publicación, los cirujanos que ofrecen implantes intracorneales –tanto el KAMRA como el antiguo Raindrop– brindan su opinión sobre quién los recibe, la mecánica de su implantación, los pros y los contra y cómo ven el futuro de dichos implantes.
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TERCERA EDICIÓN 2018 • REVIEW OF OPHTHALMOLOGY