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OMUNIÓ Órgano Informativo de la Diócesis de Querétaro
La Comunicación, hace la Comunión
N
30 de mayo de 2021 No. 1214 Año 24
En Tí confío E
n junio, mes del Sagrado Corazón de Jesús, queremos confiar plenamente en Él, como siempre, pero más en esta coyuntura que ofrecen las elecciones en nuestro país. Llamados a ejercer un deber ciudadano, el voto que emitiremos será la expresión de una decisión razonada que tiene como finalidad el construir la democracia y el bien común.
Si la Iglesia dedica este mes al Sagrado Corazón, lo hace para que cada fiel cristiano venere, honre e imite el amor de Cristo. Una de las expresiones más logradas es cuando buscamos el bienestar de todos, con leyes que nos ayuden a no perder de vista que nuestro horizonte mira mucho más lejos; con gobernantes electos por su mismo pueblo para que conduzcan este tiempo de constante construcción de la sociedad que nos sirve de ensayo para la eternidad. Un 16 de junio, pero de 1675, Santa Margarita María de Alacoque se convirtió en la vidente del Corazón rodeado de las llamas del amor, coronado de espinas y con una herida de la que brotaba sangre. “Este es mi corazón, en él vives y vivirás para siempre”, le dijo la voz del Amor. Confiamos en el Sagrado Corazón, pero él también confía en nosotros, en que hagamos de esta bella imagen una realidad en nuestra vida de todos los días, esa de amar, esa de construir juntos la fraternidad que permite a la Iglesia de este tiempo, también en la elecciones, mostrar su presencia eficaz que salva, desde las estructuras más temporales hasta la promesa de los bienes que jamás perecerán.
Promesas hechas por el Sagrado Corazón de Jesús a Santa Margarita de Alacoque: 1.- A las almas consagradas a mi Corazón, les daré las gracias necesarias para su estado. 2.- Daré la paz a las familias. 3.- Las consolaré en todas sus aflicciones. 4.- Seré su amparo y refugio seguro durante la vida, y principalmente en la hora de la muerte. 5.- Derramaré bendiciones abundantes sobre sus empresas. 6.- Los pecadores hallarán en mi Corazón la fuente y el océano infinito de la misericordia. 7.- Las almas tibias se harán fervorosas. 8.- Las almas fervorosas se elevarán rápidamente a gran perfección. 9.- Bendeciré las casas en que la imagen de mi Sagrado Corazón esté expuesta y sea honrada. 10.- Daré a los sacerdotes la gracia de mover los corazones empedernidos. 11.- Las personas que propaguen esta devoción, tendrán escrito su nombre en mi Corazón y jamás será borrado de él. 12.- A todos los que comulguen nueve primeros viernes de mes continuos, el amor omnipotente de mi Corazón les concederá la gracia de la perseverancia final.