

Murcia celebra el 27 de septiembre la edición cero de La Disquera, un nuevo encuentro fonográfico independiente en el Cuartel de Artillería impulsado por los sellos murcianos Hurrah!, Perdición, Grabaciones Vistabella, La Semilla y Son Buenos. Showcases, talleres y charlas nutren una programación gratuita que pretende consolidarse como escaparate de una escena murciana que aspira a ser industria. Pg. 2
El próximo sábado 27 de septiembre, coincidiendo con el Día Mundial del Turismo y el 1200 aniversario de la ciudad, Murcia vivirá la edición cero de La Disquera, un encuentro fonográfico independiente que nace en el Cuartel de Artillería como manifestación de la música al margen de las grandes multinacionales. Un primer paso que quiere convertirse en referencia nacional y que, con entrada gratuita, reunirá a público, artistas y profesionales en un mismo espacio desde las doce del mediodía hasta la medianoche.
La cita está organizada por los sellos murcianos Hurrah!, Perdición, Grabaciones Vistabella, La Semilla y Son Buenos, en colaboración con el Ayuntamiento de Murcia, el ICA y la SGAE, y contará con la presencia de sellos invitados de distintos puntos del país como Lunar Discos (Sevilla), Calaverita Records (Madrid) y Humo Internacional (Oviedo). Durante la jor-
nada habrá showcases, firmas de discos y presentaciones de nuevos lanzamientos en dos escenarios, eléctrico y acústico. Entre los nombres confirmados figuran Higinio, Sabino López, Pieles Sebastian, Airin, A Mares, Sistema Nervioso, Palomo Palomo, Fernando Rubio, Joaquín Talismán y Los Chamanes, Victorias y Sofía, además de más propuestas por anunciar. Más allá de lo musical, La Disquera quiere ser un punto de partida para construir un tejido independiente más sólido. Así lo explica Claudia Orellana (Son Buenos): “Sobretodo hacer frente común y darles visibilidad para que el público amante de la música pueda encontrar música independiente. Si pudiéramos crear la costumbre cívica de estar atentos a lanzamientos independientes, todo el ecosistema crecería”. Desde La Semilla, Juanmi López y Óscar Guzmán insisten en que “en Murcia empieza a crecer la conciencia de que no basta con tener bandas talentosas, sino que hace falta un tejido
“El reto es que la música sea una cadena sostenible. Y no dependa solo del entusiasmo de los músicos”.
de sellos, promotores, técnicos y medios que también puedan vivir de su trabajo. Ese es el gran reto: que la música sea una cadena sostenible y no dependa solo del entusiasmo de los músicos”
El programa también incluye un apartado formativo con charlas y talleres sobre autoedición fonográfica, comunicación creativa en redes sociales y distribución musical. Joaquín Talismán del sello Perdición ponen en valor la importancia del respaldo de las asociaciones sectoriales: “UFI y WIN están haciendo mucho por la escena independiente. Tener el apoyo de UFI nos ilusiona para avanzar. Nos legitimiza”. Con un pie en lo local y otro en lo nacional, La Disquera nace para reivindicar el papel de los sellos independientes como motor creativo y garante de la diversidad, en un momento en que la concentración de distribuidoras por parte de las majors amenaza con dejar cada vez menos espacio a la música alternativa. MS
“Esa jerga extremeña en la que nos apoyamos nos da identidad”.
El verano de 2025 ha tenido en Revolá (Infarto 2025) la banda sonora de esos días largos y sus noches al raso en cualquier lugar alejado de las capitales. Desde La Siberia Extremeña al mundo, el relato de Sanguijuelas del Guadiana llena la España vaciada con esa dosis perfecta de nostalgia y esperanza. Único y natural como el Nitrato de Chile.
El histórico cartel de Nitrato de Chile, ese diseño Art Deco que en muchos pueblos nos ofrecía la disyuntiva entre pasar de largo y seguir el camino hacia alguna capital o quedarse, inspira la portada de Revolá, el debut de Sanguijuelas del Guadiana. En Casas de Don Pedro (Badajoz), Juan, Carlos y Víctor han pasado mil veces por ese cruce y en cada azulejo seguro que hay un pensamiento de los que conforman ese relato generacional, único y natural, como rezaba el anuncio del famoso fertilizante, y con el que hilan sus canciones. Canciones de ida y vuelta, entre la vida en el pueblo y la aventura en la capital, entre Los Chunguitos, Estopa, Extremoduro o incluso los Cabales -la música que escuchaban nuestros mayores, me advertían en la primera charla que tuve con ellos- y Daft Punk o los Derby Motoreta`s Burrito Kachimba, ya dentro de su contemporaneidad -de lo que escuchamos en internet me decían-. Este cúmulo de influencias, de sensaciones, de inquietudes, de dudas y desengaños o de anhelos tenía que conformar un relato en cuerpo y alma, y ahí entra en sus vidas Jorge González (Vetusta Morla) quien les abre las puertas de Infarto Producciones, su semillero de nuevos proyectos musicales, y sobre todo ordena en capítulos el disco y también la cabeza de sus autores.
“Nos dimos cuenta de que las canciones se podían organizar en capítulos que correspondían a etapas de nuestra vida: desde la infancia en el pueblo hasta el regreso tras pasar por la ciudad. Agruparlas así tenía sentido y se entendía mejor”. Fue en abril de 2024 cuando descubrimos a Sanguijuelas del Guadiana en la Mum de Mérida, y nos quedamos enganchados a temas como Pa que me llamas o Puñales de Plata que finalmente se quedaron en un prólogo y no entraron en el álbum. “Se quedaron fuera porque eran más antiguas, grabadas antes de que pensáramos en este disco. Tenían otro sonido, más rabioso, más de local, y no encajaban con la historia de Revolá.”. Esa historia arranca con Jaribe. Un término definitorio de esa época seminal, una palabra que para ellos significa estar salvaje, correteando libremente por el pueblo durante los veranos de infancia. Estar jaribe. Ese léxico extremeño impregna sus letras, convirtiéndose en poesía para quienes lo escuchan sin conocer su significado. “Nos hemos apoyado mucho en palabras que suenan bien, que son sonoras. A lo mejor alguien no sabe lo que significan, pero enganchan. Esa jerga extremeña nos da identidad, y creemos que puede llegar a ser un término que adopten otros grupos de nuestra generación.” De ese primer capítulo destaca
100 amapolas, su primer hit y donde ese toque funk avanza un álbum sin límites estilísticos. “Para nosotros es importante que el disco no tenga barreras creativas: que se junten la rumba, el rock, el deje extremeño o andaluz, y un bombo bailable”. El segundo capítulo habla del barrunte, de este mes de septiembre donde todo el mundo se va del pueblo y te asaltan las dudas. Se van secando las flores, aquellas amapolas, y es hora de volver a las capitales. “Nos fuimos a Madrid para darnos cuenta de que lo que queríamos hacer lo teníamos que hacer aquí” -en Extremadura- Y esa identidad está presente hasta en la producción del disco. El relato tenía que ser fidedigno. “Hemos tirado incluso con maquetas caseras. Algunas canciones se hicieron en verano en una casa, grabando pianos sin saber tocar del todo, entre platos sonando o gente comiendo. Queríamos que se quedara así, real. Nuestro objetivo era que el disco sonara auténtico, no como una superproducción.” Y eso es lo que narra el cuarto capítulo y el que da nombre y sentido al álbum y al proyecto. Revolá. “Revolá significa eso: regresar a nuestra tierra y hacer música desde ahí. Mucha gente de pueblos, o incluso de ciudades pero con raíces en Extremadura, nos dice que se identifica con nuestras letras. Eso nos motiva porque hay pocos referentes de grupos que se queden en su tierra y hagan música desde allí. Si podemos ser un ejemplo, encantados.” De momento el guión se ha torcido para bien, y la gira Verbena en Vena crece y crece hasta llenar La Riviera de Madrid a nueve meses vista. Visto lo que llevan andado es normal que el set list cambie el orden del disco y termine con Llevadme a mi Extremadura, de Los Cabales. Llevadme, llevadme a mi Extremadura. Y allí dejadme en mi tierra, esparcido por los aires, para abonar la cosecha. Que buen fertilizante para nuestra cosecha. ARTURO GARCÍA
“Está bien que la gente esté recuperando el folklore, pero si todos hacemos eso, ¿Quién va a hacer las cumbias?”.
vienen de JAÉN publican ME GUSTÓ MÁS EL LIBRO (Sweet Groove Records 2025).
RR Los Mejillones Tigre regresan con Me gustó más el libro, su tercer larga duración y, probablemente, el más cuidado y ambicioso de su carrera. Tras el EP homónimo de 2018 y dos discos que les abrieron camino —Tropical y salvaje (2020) y El Fuego (2023)—, el sexteto jienense vuelve a demostrar su capacidad para agitar una coctelera única en la que caben cumbia, soul, bugalú, calypso, garage, doo-wop y psicodelia. Doce canciones que confirman su madurez sin perder la ironía, la sátira y el espíritu verbenero que siempre les ha caracterizado. “Es nuestro disco más serio en cuanto a composición, arreglos y demás. Prácticamente ha sido una evolución natural de lo que hacíamos, para mejor, creo. Las letras también están un poco más cuidadas, sí, pero no llegamos a poetas del rock, que ya tenemos suficientes, nos gusta entender de lo que van las canciones”. Esa evolución se percibe desde la portada afro-psicodélica hasta la variedad de estilos que recorren el álbum. La apertura con Cumbiando el espacio marca el tono lisérgico y cósmico del disco, un viaje intergaláctico de groove en el que los mejillones parecen disparar su música hacia las estrellas. Cuando en nuestro país todo el mundo se mira los pies (la raíz folk propia), ellos vuelan al más allá en cada disco “Ya lo hicimos en nuestro anterior EP, No dices ni mu, que tiene cierto aire flamenco, pero porque salió así, no buscamos hacer nada concreto. Por ahora estamos a lo nuestro, tenemos que apuntar a las estrellas porque tenemos los pies bien metidos en el terruño, no necesitamos reivindicar la tierra, vivir aquí ya es una reivindicación en sí. Está bien que la
gente esté recuperando el folklore, pero si todos hacemos eso ¿quién va a hacer las cumbias?”
A ese viaje sideral se suma su imaginario cinematográfico con Vente conmigo (El regreso del vampiro), donde reaparece una de sus criaturas habituales sobrevolando su estética y sus canciones. “El cine está muy presente. Somos muy fans del cine clásico de terror y del cine en general. Esta vez el vampiro viene acompañado por el hombre lobo, que también tiene su canción en el disco, habrá que dar cobijo más adelante a la momia, Frankenstein o la criatura del pantano, que también tienen su corazoncito”
La melancolía veraniega de En la playa recuerda a los veranos sesenteros del Dúo Dinámico y rescata cierto aire kitsch de Eurovisión. ¿Los Mejillones Tigre en el Benidorm Fest? “Es que a Eurovisión han ido France Gall, ABBA o Raphael, pero desde hace años es un esperpento. Nuestra música sí que tiene algo de vacaciones en Benidorm, ahora, de ahí a ir al Benidorm Fest ni idea. ¿Sacaríamos algún voto? Si alguien cree que deberíamos hacerlo por favor que nos mande un telegrama”.
En Los Mejillones nada es lo que parece. Les gusta llevar los géneros al límite. Soul castizo en Mi turno, garage directo en Ahí está la puerta y la guajira crepuscular de Mirando al cielo son algunos ejemplos. “En principio no hay límites, al final si te los pones te puedes acartonar. Si nos mola va para adelante. Bueno quizá un límite sería el Auto-Tune”
La cara B despliega aún más variedad: Bugalú, con su paisano Chico Pérez al piano, es uno de los momentos más celebrados. La otra aparición es en Luna azul, con los comentados aullidos del hombre lobo. (El) diablo se adueña de la pista con otra cumbia irresistible; y
Mejor que tú arremete con pop psicodélico contra el moderno de medio pelo. El derroche instrumental llega en A mi ritmo se baila, donde vientos y flauta serpenteante elevan el groove hasta lo hipnótico. El cierre, Desde abajo, es un calipso elegante y corrosivo contra quienes engañan y se aprovechan de la gente. Todo este material en el espacio que permite una cinta de dos pulgadas. Ya saben, menos es más. El disco fue grabado en analógico en el estudio de Carlos Díaz, una decisión que responde tanto a un gesto romántico como a un reto creativo: “Lo hicimos por el romanticismo porque somos un poco románticos, pero también por el reto. Saber que te tienes que adaptar a una forma de grabar, unos tiempos, un número limitado de pistas… tienes que estar mucho más metido, para el resultado final es genial porque tienes que hilar fino, es como hacer una crítica al régimen con la censura de por medio, tienes que estar más avispado”. Con Me gustó más el libro, Los Mejillones Tigre alcanzan esa tan traída madurez pero en su justa medida, la suficiente para no hundirse en el terruño. Un disco tropical y afilado, divertido y corrosivo, capaz de sonar a verbena intergaláctica y, al mismo tiempo, señalar con ironía las contradicciones de nuestro tiempo. Los Mejillones Tigre son de Jaén, una ciudad cuya escena sufre crestas y valles. “A Jaén le pasa mucho que no hay estabilidad, una época buena, una mala, no hay continuidad. Las salas lo tienen difícil y así es complicado que cuajen las cosas, y siempre ha habido bandas, algunas muy buenas. Se hace muy difícil sacar un proyecto adelante al no haber prácticamente industria. Pero al menos Jaén no está gentrificado, que te tengan abandonado en un rincón también tiene su parte positiva”.
ARTURO GARCÍA
“Tocaremos en acústico cuando el Mediterráneo no sea un foso”.
vienen de SEVILLA publican CRUCES (Lunar 2025)
RR Pirámide publican Cruces, su segundo álbum, un trabajo que combina electrónica, sonidos industriales y raíces andaluzas en un ejercicio artístico y reivindicativo. El título hace referencia tanto al cruce del Estrecho de Gibraltar en busca de una vida mejor como a las muertes que este tránsito sigue provocando. Tras su debut con Campo Modular (Lunar, 2023), centrado en el vino como eje conceptual, la banda firma ahora un disco que aborda la migración y los discursos de odio, consolidando su propuesta como un proyecto que utiliza la música para denunciar y generar memoria colectiva. “Hemos querido hablar de la migración porque es un tema que nos atraviesa tanto emocionalmente como por cercanía en el caso del Estrecho de Gibraltar (…) Creemos justo mojarnos y poner el dedo en la llaga correcta, que no es otra que nuestras políticas migratorias. No deberíamos normalizar que el Mediterráneo sea un foso” (Karvy). A pesar de seguir fusionando la tradición y la electrónica, en este disco el flamenco parece que no es tan evidente, o al menos no es tan obvio, es más palpable en las estructuras y los ritmos que en la propia sonoridad. Por ejemplo “Mirarse el Hombro” puede recordar rítmicamente a canciones de Burial pero es una bulería, “Cierto, creo que la clave está en que la fuente de inspiración musical del disco anterior fue el flamenco y la de este ha sido la musicalidad que nos evocaba la temática migratoria: la celeridad de los ritmos, oscuridad, ruidos... No obstante, el flamenco está en el disco. Incluso podríamos decir que hay más formalidades flamencas en este disco, pero pasan más desapercibidas porque la sonoridad es muy protagonista” (Claudio). “También ha sido intencionado que las influencias folclóricas no fueran tan evidentes, queríamos mostrar nuestras referencias y dar visibilidad a nuestra realidad cultural. Ritmos y sonoridades más industriales, ritmos rotos británicos y cadencias africanas han ganado protagonismo y coexisten con las referencias más locales. Intentamos bastante huir de lo obvio, y experimentar también en conceptos” (Antonio).
El artista por naturaleza no suele posicionarse políticamente, Campo Modular contenía mucho mensaje intrínseco sobre la Memoria Histórica, Cruces sobre la problemática de las políticas migratorias “A Pirámide nos interesa y atrae el “arte sucio”. Consumir productos bonitos y cómodos está bien en algunos momentos pero realmente nos llena más esa expresión artística que se enfanga y nada en la llaga. Creemos que como artistas tenemos la responsabilidad de señalar y no solo contentar. Entendemos el arte como una herramienta transformadora que nos haga avanzar hacia un lugar mejor y a veces para eso hace falta ensuciarse las manos, de ahí lo de “arte sucio” y también la razón de que este álbum suene más árido, industrial y mugriento. Tocaremos en acústico cuando el Mediterráneo no sea un foso” (Karvy).
PEPE SALANDER
Lugar: Diversos Escenarios. Cartagena Fecha: 18 al 26/07/25
Tres décadas de festival, de olas musicales venidas del ancho mundo que hay que celebrar por todo lo alto, con artistas nacionales e internacionales de primera y, como país invitado de este año, Corea del Sur. Cartagena volvió a ser puerto y faro sonoro, con la ciudad entregada a un acontecimiento que mantiene vivo su espíritu de encuentro y diversidad.
El arranque, el viernes 18, mostró ya el poder de esta edición. El Patio del CIM vibró con la voz de oro de Salif Keïta, que presentó So Kono (25) evocando a Cesária Évora en un eterno Yamore. El Auditorio Paco Martín se rindió después al corazón abierto de Natalia Lafourcade, con Cancionera (25), y estalló con el torbellino de Queralt Lahoz, que con 9:30 P.M. (25) provocó el primer temblor urbano-flamenco en Cartagena. En la Plaza del Ayuntamiento, los coreanos Leenachil revisitaron el pansori con indie pop y coreografías coloridas, y la madrugada en el Castillo Árabe se tiñó de post-rock expansivo con Jambinai. El sábado 19 fue territorio de fusión y destacaron: El saxo de Seun Kuti & Egypt 80 con sus sonidos libérrimos y combativos, seguidos de Ezra Collective, recientes ganadores del Mercury Prize, encendiendo en el Auditorio una fiesta de jazz, afrobeat y sonidos urbanos imparables; mientras en el Patio del CIM, La Tania dejó caer la tarde a fuego lento con una copla delicada y fresca, atravesando con su voz el lado izquierdo del pecho de los presentes, como esos Quereles de verano que atrapan sin avisar, como mágicos almendros que
florecen de su boca.
El domingo 20 trajo dos de los momentos flamencos más intensos: Ángeles Toledano emocionó con la hondura de Sangre Sucia y la solvencia de un directo tan puro como electrizante, y Yerai Cortés llenó el Auditorio con la elegancia de su toque y ese luminoso espectáculo coral. De cine. El lunes 21 fue noche de contrastes. La surcoreana Youn Sun Nah deslumbró con un registro cristalino que convirtió el aire en música pura, mientras el legendario Toquinho puso en pie al Auditorio con un viaje por la memoria de la música brasileña. Su concierto se convirtió en fiesta popular y se le entregó el Premio La Mar de Músicas en reconocimiento a toda una vida dedicada a la canción.
El martes 22 quedó marcado por la emoción y la diversidad. En el Auditorio Paco Martín, Valeria Castro ofreció un concierto íntimo atravesado por la reciente pérdida de su abuela Micaela, y cada silencio compartido se convirtió en un acto de ternura colectiva. La Plaza del Ayuntamiento se entregó al pop fronterizo de Río Viré, liderados por Rubén Villahermosa, que jugaban en casa y se engrandecieron con las colaboraciones de Muerdo y Antonio García (Arde Bogotá). Antes, en el coqueto escenario de la Plaza del CIM, una ventana al puerto de Cartagena, Le Parody desplegó su electrónica mestiza, poética y reivindicativa, dando forma a un directo tan bello como hipnótico.
La Explanada del Puerto ardió con Mala Rodríguez, que recordó por qué sus himnos siguen siendo eternos y necesarios. El impulso coreano se reforzó durante la jornada con el R&B jazzístico de Sunwoojunga y, por el lado más comercial, con W24 y Bewave, que trajeron el k-pop, en sus amplias vertientes, a este Mediterrá-
neo abierto al mundo.
No todo fue celebración: la esperada cita conjunta de Silvia Pérez Cruz y Salvador Sobral quedó interrumpida tras apenas tres canciones por culpa de la lluvia, dejando uno de los momentos más agridulces de la edición. Eso sí, ya desenchufados, nos regalaron dos inolvidables canciones a viva voz que fueron milagro y vida extra. Antes pudimos disfrutar del quejío puro y libre de María Terremoto, que aún resuena en Cartagena.
En la recta final del festival destacó Carlos Ares y su banda, firmando uno de los conciertos más vibrantes de la edición en la Plaza del Ayuntamiento, en conexión total con el público. El Premio Paco Martín recayó en Maestro Espada, ejemplo de autenticidad y riesgo creativo. Y tras ellos, el universo de un Guitarricadelafuente sin techo a la vista.
La clausura, el sábado 26, estuvo a la altura de las tres décadas cumplidas. De la magia boliviana de Luzmila Carpio, a la clase y belleza de la nueva voz de la chanson francesa, Clara Ysé, pasando luego a “revolá” con la nueva savia extremeña de Sanguijuelas del Guadiana, confirmando que desde la España vaciada también llegan voces con fuerza y verdad. Como colofón, el regreso del supergrupo G-5 - El Canijo de Jerez, El Ratón, Kiko Veneno, Muchachito y Tomasito - convirtió la última noche en una fiesta irrepetible.
Treinta años después, La Mar de Músicas sigue latiendo fuerte y arrojando luz a borbotones en tiempos oscuros, demostrando que Cartagena no solo acoge un festival, sino un territorio de mestizaje y libertad donde las personas y las culturas del mundo se encuentran sin buscarse cada verano, con la música y el corazón por delante. DAVID PÉREZ MARÍN
¿Hay algo más cartagenero que venir del IES Jiménez de la Espada y dar tu primer beso en Islas Menores? A Río Viré, o sea, a Rubén Villahermosa, solo le faltaba un dueto rompedor en la Plaza del Ayuntamiento de su ciudad. Y el momentazo llegó cuando subió al escenario Antonio García, cantante de Arde Bogotá. Un instante de euforia que se encadenó con otro muy distinto, también de emociones a flor de piel, arriba, en el Auditorio Paco Martín. Allí apareció Valeria Castro, haciendo de tripas corazón para ofrecer un recital tan difícil como sentido y honesto cuatro días después de perder a su abuela, su mayor referente, a quien dedicó “guerrera”.
Fue estremecedor. Y un signo del crecimiento de la canción de autor que brota de la raíz más cercana, tan bien reflejada en La Mar de Músicas. La palmera regresó al festival a lo grande, tras su paso en 2022. Con esa voz profunda,
ajada, grumosa, que no se corresponde con sus 26 años. La gente tiró de ella en Cartagena. Y Valeria correspondió con un canto a la vulnerabilidad, en un ejercicio de catarsis nutrido de composiciones de su reciente segundo álbum, El cuerpo después de todo. Asistimos a las confesiones de una artista isleña ultrasensible que se abrió en canal, dejando que el público, en una tórrida noche entre el puerto y los vestigios romanos, se asomara a las entrañas mismas del alma. El vals, la cumbia, la trova, el carnavalito o el son guiaron un concierto que nunca perdió ese regusto de trovadora clásica, de autora que ha llegado para hacerse un hueco entre personalidades absolutas de la canción española. Los guiños a Chavela Vargas o a José Alfredo Jiménez parecían manos tendidas a una tradición que la de La Palma reaviva. Más que nunca, la soledad fue un espacio compartido. EDUARDO TÉBAR
Fecha: 25 y 26/07/25
Estamos en el año 2025. Toda la geografía española está ocupada cada verano por festivales inmensos. ¿Toda? ¡No! Un grupo de amigos de un pequeño pueblo de la Sierra Sur de Jaén resiste cada verano al fenómeno invasor y absorbente de los macrofestivales con un modelo propio de ocio musical alternativo.
Su nombre: Vértigo Estival.
Como la aldea gala que nunca se dejó someter por el Imperio romano, el Vértigo Estival lleva veinte años defendiendo su territorio frente al empuje de un modelo ultracapitalista extenuante y absorbente. Nació en 2005, cuando un puñado de colegas de Martos (nuestros particulares Asterix y Obelix), fans de aquel indie español en ciernes, decidieron unirse a la incipiente tendencia de crear un festival. Y lo hicieron a su manera, poniendo en el centro lo que nunca debe obviarse en eventos de este tipo: el amor por la música. Ese pequeño sueño celebró en esta edición su vigésimo cumpleaños. Y lo hizo fiel a su espíritu: sin artificios, con la música como columna vertebral y con un cartel que condensa a la perfección lo que el Vértigo significa.
Y como todo buen cumpleaños, este empezó con un brindis de celebración, toda una declaración de intenciones: un gesto de comunidad, de celebración compartida. Después, por fin, llegó la música. Desde hace unos años, el festival ha querido ser “refugio” de bandas que muchas veces no encuentran el hueco que realmente merecen en los “macrocarteles”. Chinachinachina inauguraron el fin de semana (y su carrera) con el primer concierto de su trayectoria: el trío jiennense, formado por miembros
de Uniforms, Sr. Chinarro y Oh, Trikelians!, encandiló con un repertorio hipnótico entre el dream rock y el R&B. Como también lo hizo el dúo Lady Banana, una de las apuestas más rock de esta edición, que descargó un directo enérgico y afilado. Y, como colofón de la primera jornada, los gigantescos Triángulo de Amor Bizarro: los gallegos regalaron un setlist que combinó los temas más grandes de su trayectoria y algunos nuevos del esperadísimo disco que prometen para este otoño, para acabar soplando las velas, junto a la organización del festival, por su 20º cumpleaños, que ellos también celebraron el año pasado. Pero aún quedó mucha energía para el sábado. El día arrancó con el desparpajo “cuquipunki” de Carrera Blanca, flamantes ganadores del Himno Vértigo 2025 (otra de las invenciones de esta Galia jiennense) por su hitmno Adulto funcional. Después, la insolencia local y sesentera del grunge de Las Gónadas convirtió el arranque de jornada en una fiesta tan marciana como bailable. La energía no decayó con Cometa, que sumergieron al respetable en su Fanfarria clandestina, repleta de guitarras luminosas a lo Queen y melodías contagiosas a lo ABBA, ni con los incandescentes The Gulps, quienes aportaron el toque internacional con un directo de los más arrolladores que se recuerdan en Bellavista. La recta final del día quedó en manos de dos de las bandas rock que más están dando que hablar en el panorama underground actual: primero, la melancolía vibrante de Cora Yako, que a más de uno recordó a cierto grupo granadino con nombre de cuerpo celeste; y la mezcla de rabia, ironía y pop-punk desenfadado de Aiko el Grupo, el plato fuerte de la noche, presentando su nuevo EP, A tomar por culo Y por segundo año consecutivo, el Vértigo Estival también guardó un espacio para
la calma con los Acústicos en el jardín, una cita íntima en la que brillaron las canciones delicadas de Juana Lennon y el magnetismo de Lea Leone. Y mención especial merece un variadísimo y muy interesante cartel de DJs, comandado por la veterana y melómana Eme DJ, el desparpajo de Travieso, el tándem electrónico de Ocktive & Alesa y los habituales Centenita, el set en vinilo de Carmod y la erudición pachanguera de Dr. Música Ismael. Todo ello conformó un cartel redondo que resumió a la perfección el espíritu del Vértigo: variedad, talento y una mezcla perfecta de madurez y juventud en dosis concentradas, lejos del ruido y la sobreoferta de los macrofestivales.
Quizás ahí resida la magia: en mantener, veinte años después, el alma con la que todo empezó. Porque el Vértigo Estival no se explica solo por sus conciertos, sino por lo que los rodea. Aquí no hay pulseras cashless, ni colas interminables para pedir una cerveza, ni escenarios rebautizados con nombres de marcas multinacionales… Lo que sí hay es una gran piscina municipal en la que poder disfrutar de los conciertos con el “culillo remojao”, precios popularísimos y la sensación de estar en una reunión de amigos en la que, por suerte, hay muy buena banda sonora.
Veinte años es mucho tiempo. En un panorama en el que algunos proyectos se han quedado por el camino, arrasados por la pandemia o hundidos por la avaricia y la grandilocuencia, que un proyecto como el Vértigo Estival siga tan vivo como cuando arrancó en 2005 es casi un milagro. Quizá su secreto sea sencillo: resistir sin perder la esencia, como esa aldea irreductible de los cómics de Goscinny y Uderzo que, veinte años después, sigue demostrando que otra manera de celebrar la música es posible. RICARDO RUIZ VARO
Dique de Levante. Málaga
Fecha: 24 al 26/07/25
Esta quinta edición del festival malagueño ha conseguido, que entre el bullicioso desembarco de grandes cruceros del verano como Viva Suecia, Siloé o Dani Fernández, haya espacio para descubrir esos pequeños detalles que, sin notarlos, te acarician como la brisa marina. Te los compartimos. Dos pares de trenzas con extensiones rosas y azules dan volteretas al ritmo de Turnedo de Iván Ferreiro. Sus dueñas, emocionadas y animadas, intentan acelerar las manecillas del reloj bajo la mirada atenta de sus padres. Acentos de sal se mezclan con los de interior, refugiados en la sombra de las barras del escenario principal. En sus vasos, el motivo de su presencia: El Brisa Festival 2025. Sanguijuelas del Guadiana son los encargados de retirar el papel de celofán del escenario e inaugurar el Brisa. Los de la Siberia extremeña vienen con el objetivo de poner el foco en la España rural y, aunque “les da igual que les juren bandera”, tres banderas de Extremadura se alzaron en su honor entre el público.
Unos problemas técnicos alargan la salida de Cariño hasta las 20:44. La ausencia de María Talaverano, la vocalista
principal, desconcierta a un público que mastica la posibilidad de que se haya desvinculado del grupo. Cantar, saltar y tener pensamientos intrusivos a la vez es incompatible, y la llegada de tamagotchi termina de llevárselos junto a la cerveza que salía disparada de su recipiente. Entre la marea amarilla que espera a Viva Suecia, un hada con luces led en la tiara y en las alas destaca entre la marabunta, pero podría ser una harpía sedienta de Sangre Rafa Val y Fito Robles (Siloé) reparten la magia necesaria en el escenario para saciar a todas las hadas que disfrutaban con ellos, aunque alguna no conocía del todo a los murcianos. —A lo mejor te suena la de “no te creas lo que dicen los cantantes” —intenta ubicar una mujer a su amiga, que niega con la cabeza. —Es que yo no lo entono bien y no te suena, pero ya verás. — ¡Esta es! — Entre todas las hadas, ella es la desubic-hada, pero nadie puede resistirse a El Bien de Viva Suecia. Varry Brava y el Dj set de Juanca y Pope Supersubmarina cargaron con la responsabilidad de ponerle el broche a la primera jornada. Un niño con una camiseta de Siloé un par de tallas más grande que la suya corre hacia su madre con la sonrisa del gato de Alicia en el País de las Maravillas. El pequeño, después de disfrutar del concierto de Melifluo, ha sido obsequiado con una
púa de la banda. El Brisa Festival también cumple con el rol de ser un punto de reencuentro. Alberttinny es cómplice de brindis nostálgicos y de abrazos que saben a tiempos pasados, a Dulce memoria. Califato ¾ y Carmen Xía convirtieron su actuación en un grito con acento andaluz: banderas palestinas al viento, versos atravesados de rabia y orgullo, y una denuncia clara a Israel como “genocida”. “Qué bonita es Andalucía, pero no es pa’ ustedes. Es pa’ los turistas”, sentencia Califato ¾. Ignorentes se cuelan entre el público que les recibe con los brazos abiertos y vibrando alto con Calle Larios Por otro lado, Sike encandila al ministage, que añade Kuruma en su lista de canciones favoritas.
La brisa de la jornada resulta ser Zahara con un set ya impecable. Lento Ternura es el equilibrio perfecto en ese moderno vodevil en el que encaja cada una de sus canciones y el background que las precede. Demasiadas Canciones y ni una sobra. Dos Zaharas (la tierna y la otra) y un michi dejan enganchados a los que posponen su cena por no levantar la vista del escenario Victoria y perder el sitio para lo que viene después. Y los que se van para la acogedora zona de restauración se llevan no una victoria si no varias. Los sevillanos Victorias nos sacian definitivamente. Dani Fernández y Siloé podía resultar
una cena demasiado copiosa pero no para aquellos que llevan meses esperando este momento. Excelso el de Alcázar de San Juan y entregados como en casa, lo son ya, los pucelanos.
Correr hacia las primeras filas es un deporte de riesgo, sobre todo si es en Málaga durante una tarde de julio, pero es el precio a pagar para ver a Neverland Bari y a Carlos Ares de cerca. En ambos casos fueron ellos los que te llevaron a la distancia corta en cuerpo y alma, en especial el gallego, con un show cargado de magnetismo. Los abanicos son los partner in crime para no pasar unos Días de Perros y disfrutar del Brisa Festival desde primera hora. Antes de que culmine el concierto de Carlos Ares, una chica reparte unos folletos rosas: “Llamamiento a personas con buen gusto musical! No faltes a nuestra cita en el escenario mini (carpa)! Mmmuak”, reza, acompañado de dibujos de corazones, lunas, nubes y flores. Rocío Lapaz es la persona que envía esas invitaciones, asegurando un show inolvidable. Jassy Ojeda, escoltado por sus visuales de Inazuma Eleven, canta por primera vez Alta Mar, un tema que había salido ese mismo día. La escena malagueña se da la mano porque son Sike, después de acelerar las pulsaciones de los asistentes el día anterior, quienes se gozan el concierto. Aunque para estreno el de Anni B Sweet que adelantó un tema en rigurosa exclusiva y ejerció de madrina de esa escena que el sábado de Brisa lució especialmente. Miss Cafeína y Fauces son los primeros de los últimos bailes. Una sevillana inesperada entre pompas de jabón, dos amigos abrazados por los hombros y las miradas de quienes saben que más pronto que tarde llega el final. Las gaviotas se saben protagonistas en el Dique de Levante. Sobrevuelan elegantes el escenario en el que Duncan Dhu canta, respaldado por el público, Cien gaviotas. Y cien son las veces que habrían seguido coreando el estribillo. Alguien luce la bandera LGTBIQ+ a modo de capa, que ondea orgullosa durante La Revolución Sexual La Casa Azul recibe los últimos vitoreos de la noche. Pedro, uno de los camareros, sirve su última cerveza. El Brisa Festival concluye un año más tras tres días que han pasado como un suspiro. ESTELLA SERRANO
BORA BORA
Plaza Universidad 1 Granada
LOCOLOCO VINTAGE
San Carlos, 15 Murcia
S. TEATRO TRAJANO Muza, 50 Mérida
FAROLES
Oviedo, 4
Talarrubias (Badajoz)
BAR MUTANTE
Musgo, 16
Dos Hermanas (SE)
BOTÁNICO CAFÉ
Málaga, 3, Granada
ESPACIO
BELLEARTES
Donoso Cortés, 6 Cáceres
PLANTABAJA
Joaquín Ruano, 27 Linares
TEATRO Mª LUISA
Camilo José Cela, 9
Mérida KAVKA LIBROS
C. CULT. ALCAZABA
John Lennon, 5 Mérida
MAPA TABERNA
Simón García, 57 Murcia
EL BAR DE ERIC Escuelas, 8 Granada
LA TÉRMICA
Avda de los Guindos, 48 Málaga
LA CAJA BLANCA
Editor Ángel Caffarena,8 Málaga
SALA CONTACTO
Crta Jarandilla. Navalmoral de la Mata.
FUNCLUB
Alameda de Hércules, 61. Sevilla
SUBTERRÁNEA
Horno de Abad, 8 Granada
Horno de Abad, 11 Granada
JAM
Obispo Hurtado, 11 Granada
DISCOS COMIX
Enrique Villar, 11 Murcia
CÍRCULO PACENSE
Ramón Albarrán, 24 Badajoz
VELVET CLUB
Convalecientes, 11 Málaga
OFFCULTURA
Ricardo Carapeto Zambrano, 148 Badajoz
GRAN TEATRO
San Antón s/n Cáceres
TEATRO LÓPEZ DE AYALA
Plaza Minayo Badajoz
5 al 26 de septiembre
Iván Ferreiro, Morgan, Silvia Pérez Cruz, Salvador Sobral, The Cat Empire, Antonio Orozco, Ana Belén. 1001musicas.es
La quinta edición del ciclo se expande por distintos espacios de la ciudad y concentra el grueso de su programación en septiembre. Tras Iván Ferreiro y Morgan en el Teatro CajaGranada, llegará una de las grandes citas del año: The Cat Empire en Industrial Copera. La banda australiana presentará Bird In Paradise, un álbum que abraza nuevas influencias como el flamenco —con el tema “La Gracia” como guiño a España— y que confirma su capacidad para convertir cada concierto en una celebración global de ska, funk, jazz y ritmos del mundo.
11, 12 y 13 de septiembre
ZAIDÍN ROCK
GRANADA
Muerdo, Tu Otra Bonita, 091, Lagartija Nick, Hora Zulú, Raule, Morochos, Los Estanques y el Canijo, D’Baldomeros…
6 de septiembre
MOLINA DE SEGURA (MURCIA)
Viva Suecia, Dani Fernández, Carlos Sadness, Pignoise, ELYELLA, Delaporte, Besmaya... b-sidefestival.com
4 al 13 de septiembre
MURCIA
Luis Prado & Band, Caracazador, A Mares, Higinio, Gallopedro, Al Dual, Estrella Fugaz, Crocodiles, Los Bengala, Cala Vento, Parquesvr, Tito Ramírez, Pieles Sebastián, Carmesí, León Benavente.
El veterano festival indie celebra su 29ª edición con epicentro en el Murcia Parque —donde brillarán Crocodiles, Los Bengala, Cala Vento, Parquesvr o Tito Ramírez— y un gran cierre con León Benavente (único concierto de pago). Este año se abre, además, a nuevas ubicaciones como Los Molinos del Río, Locoloco Vintage o la Filmoteca Regional, que se unen a Ítaca, y La Yesería, reforzando su esencia urbana y su apuesta por artistas emergentes y descubrimientos que nutren la escena local de vitamina C, como el caso de A mares, Higinio o Gallopedro.
19 y 20 de septiembre
CARCABUEY (CÓRDOBA)
Iseo & Dodosound, Baiuca, Natalia Doco, Le Parody, María del Tango, Carla Valenti, Delameseta, Electronic Flamenco Esquejes (EFE), Anaïs Begon, Lalola, Ussuru Sound, Almas de Cántaro.. sonraiz.es
Uno de los festivales más singulares del sur vuelve a combinar música de raíz con vanguardia, gastronomía local y naturaleza. En sus escenarios se cruzan propuestas como Iseo & Dodosound, Baiuca o Natalia Doco, mientras que talleres de yoga, biodanza y experiencias inmersivas en torno al vino completan una programación que convierte la ruralidad y el
23 al 27 de septiembre
MELILLA
26 y 27 de septiembre
CABO DE GATA (ALMERÍA)
Perro, La Culpa, Orina, Las Aspiradoras, Marrajos, Cromo, Panrike, The Oompaloompas, Chester, Vonbier, Nano Vitrus, AlbertoFuzz...
ufovision.es
Llega el pitote de septiembre. El Camping de Los Escullos se prepara para el alunizaje de seres venidos de todas las galaxias del underground conocidas y no conocidas. Únete a Panrike, tu amigo extraterrestre y prepara tu disfraz in-
Califato 3/4, Ghoula, Júlia Colom, Ko Shin Moon, Tech Panda x Kenzani, Talvin Singh, Daniela Pes, Bombino, El Nido, Kabeaushé, The Leila, Idoipe... iwafest.com
El Fuerte de Victoria Grande volverá a llenarse de música, arte y mestizaje cultural con un cartel tan diverso como estimulante: Califato ¾, Bombino, Ko Shin Moon, Tech Panda x Kenzani, Talvin Singh, Júlia Colom o Kabeaushé, entre otros. Un encuentro que convierte a Melilla en epicentro mediterráneo de la cultura amazigh y las sonoridades globales.
3 y 4 de octubre
DON BENITO (BADAJOZ)
Carolina Durante, Lia Kali, La Casa Azul, Alcalá Norte, Depresión Sonora, Sanguijuelas del Guadiana, Marlena, Carlangas, Neverland Bari, Hombre Tigre, Bolsa de Moscas, Patronato, Juanca Supersub DJ Set, Mala Sangre... contempopranea.com
La 29ª edición del veterano festival indie estrena ciudad y calendario: cambia Olivenza por Don Benito, se muda al Recinto FEVAL y mantiene su esencia pop. Encabezan Carolina Durante, Lia Kali y La Casa Azul, acompañados por contempopráneos como Alcalá Norte, Depresión Sonora o Sanguijuelas del Guadiana. Una bienvenida festiva gratuita en la Plaza de España precede a un fin de semana con food trucks, escenarios cubiertos y aire libre que auspician un celebrado cambio de estación.
10, 11 y 12 de octubre
CÁCERES
Antony Z, Aslándticos, Boikot, Faenna, Hard GZ, Ill Pequeño & Ergo Pro, La Regadera, Mägo de Oz, Miguel Campello, Morad, Raule, Riot Propaganda, Soziedad Alkohólika, Tribade, Canchalera, Cecilia Zango... extremusika.es
3, 4 y 5 de octubre
CABO DE GATA (ALMERÍA)
Iván Ferreiro, Pignoise, Marlena, Paula Mattheus, Michael Foster, Me & The Reptiles... mojacar5estrella.es
Iván Ferreiro lidera un cartel en el que también destacan artistas gourmets como Marlena o Paula Mattheus. Todo ello acompañado de showcookings a cargo de chefs como Ángel León o Cristóbal Muñoz, en un entorno de resort costero convertido en epicentro cultural para cerrar el verano con el mejor sabor de boca.
11 de octubre
UN BUEN DÍA EN
BULLAS (MURCIA)
Los Planetas, Los Punsetes, Perro, Marcelo Criminal, Las Dianas, El Diablo de Shangai, Edu Requejo, Las Petunias, Dame Área, Iluminados, Joseluis, Púrpura.. mieldemoscas.com
La Almazara y la explanada Jaraíz se transforman en escenario de un mini-festival que arranca al mediodía y alarga la fiesta hasta la madrugada. Los Planetas lideran una jornada particular, acompañados por bandas y proyectos afines como Los Punsetes, Perro, Las Dianas o Iluminados. Precisamente Iluminados, la banda de Bullas y germen de aquella explosión independiente de los 90 , celebra 30 años de su referenciado álbum Selene 500. Destacamos nombres propios como Marcelo Criminal, Edu Requejo y sobre todo, Joseluis. Habrá foodtrucks y espacio vital, y a los postres Don Gonzalo y la crew del Canela Party. Un mal día lo tiene cualquiera pero un buen día...
11 y 12 de octubre
ZAHARA DE LA SIERRA (CÁDIZ)
Miguel Campello, Raule, La Guardia, Aslándticos, Morochos, Javypablo, Colectivo Panamera, La Perra Blanco, La Jungla Band, Nya de la Rubia, Alan Nepa, Elioth... sierrasurfestival.com