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EdilbErto Aldán 4 y
Hay sumas que restan, la oposición ante el 2024
Bueno, no me cansa por una razón, porque los priistas tienen derecho a preguntar y uno tiene derecho a responder y en ese sentido seguimos pensando lo mismo. Estamos construyendo un ejercicio de consulta, como ninguna otra fuerza y lo estamos haciendo con toda oportunidad. ¿Por qué? Porque si queremos ser diferentes tenemos que diferenciarnos en los hechos, hay quienes dicen: “no, por qué no se suman, porque si ustedes se sumaran ya estaría garantizado esto”.
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Y esto no es así, porque no todas las sumas suman, hay sumas que restan y así le pasó a la Alianza en el 2021 y los resultados trágicos para ellos ahí están. Y Andrés Manuel sabe, como Presidente de la República y como líder de su partido y que como Presidente no está incluyendo a todos los mexicanos, sino trabajando desde ahora, todos los días, para imaginar retener la Presidencia de la República en el 2024, que la única oposición real que tiene enfrente es Movimiento Ciudadano y esto lo perturba y lo perturba mucho. Vamos a ganarle la Presidencia de la República en el dos mil veinticuatro porque habrá congruencia y porque en Movimiento Ciudadano estamos convencidos de que la alianza tiene que ser con las y los ciudadanos y por encima los partidos. Derrotar esas fuerzas tradicionales no será una tarea sencilla, pero ya lo hemos logrado y varias veces, en el propio Campeche, Eliseo Fernández sacó más votos por Movimiento Ciudadano que Morena, en el estado vecino al Presidente, pero adicionalmente ellos ganaron con fraude. Fraude alentado desde Morena, precisamente por quien hoy es secretario de gobernación que era gobernador y por el alcalde anterior que había sido del PRI y que fue a hacer fraude a Campeche y que permitió que, con los votos del Partido del Trabajo, aparentemente hayan obtenido por menos de cinco mil votos un triunfo que nosotros siempre cuestionamos sobre el Movimiento Ciudadano. Pero usan las mismas prácticas, como saben que ahí surgió un nuevo liderazgo, están intentando a toda costa descabezar el prestigio de Eliseo Fernández y con temas baladíes están agraviándolo. ¿Por qué? Porque lo quieren desprestigiar, como lo están haciendo a nivel nacional, por poner otro ejemplo, con Ricardo Anaya, que es el segundo mexicano más conocido en la vida pública del país, pero le están pegue y pegue y pegue para que sea un conocimiento, pero con altos negativos y esas prácticas, son prácticas del pasado, son prácticas priistas pero que este gobierno las sintonizan como si fueran parte de la melodía de un verdadero drama que están construyendo para México. Un México de regresión, un México de inseguridad, un México en el que la falta atención médica campea, se están atendiendo a menos personas que en el Seguro Popular, dieciocho millones de personas menos, se están Dante Delgado | Foto Cristian de Lira
Hay sumas que restan, cómo explicarle a la gente que las fuerzas políticas que antes se disputaban entre sí el electorado, porque había situaciones de confrontación, ahora van juntos distribuyendo mal las medicinas por falta de suministro y se ha permitido que muchas personas fallezcan por falta de atención, particularmente en el caso de falta de medicamentos para los niños y los jóvenes que se encuentran en condiciones de alto riesgo y vulnerabilidad por padecer cáncer. Todo ese tipo de mecanismos disfuncionales tienen que ser superados y se van a superar con prácticas de buen gobierno, que es la que Movimiento Ciudadano propone a la sociedad nacional, por eso vamos a ganar. Necesitamos que la sociedad nacional abra los espacios a la participación, necesitamos, claro y nosotros lo queremos, que los medios de comunicación generen debates entre las diferentes fuerzas políticas, basta ya de que sea una permanente spotización para que caigamos en el terreno de la confrontación de ideas y las ideas más modernas, más funcionales, con visión de futuro y de grandeza las tiene y las aporta Movimiento Ciudadano. ¿Por qué? porque recoge las causas de la sociedad.
No dudo. En el Congreso creo que el trabajo que ha hecho la bancada naranja, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, está concentrada en los verdaderos problemas que tiene el país. Uno es el de seguridad social, la otra es desempleo, la seguridad, que no hay desarrollo económico y, pero el problema, de nuevo, es que todos estamos hablando y hablándole a Andrés Manuel López Obrador. Entonces, eso es posible que ¿cómo le va a hacer Movimiento Ciudadano para que centremos la atención en las causas? y lo mismo digo de la campaña en Aguascalientes, no estamos hablando de la propuesta de Movimiento Ciudadano, contra lo que aquí sería la mafia del poder, que es este trío de partidos que ahora se aliaron porque saben que el PAN mantiene estas prácticas de gobierno priista.
Sí, para mí es muy importante que se registre lo siguiente, los tiempos y los espacios en los medios de comunicación tradicionales se los han dado también a los partidos tradicionales y han sido incapaces de acreditar que son oposición. Los resultados del 2021, los resultados del veintidós van a permitirnos abrir espacios para advertir que Movimiento Ciudadano es la opción que tiene visión de futuro y de grandeza por una parte y estaremos en posibilidades, en los próximos tres meses, de construir el discurso político y la estrategia que permita neutralizar esto que se acaba de comentar. Que en México se tiene como punto de partida y como eje de la discusión nacional lo que dice o deja de hacer, Andrés Manuel López Obrador. Eso ya no puede seguir más, ya no puede seguir así, porque está pervirtiendo la vida democrática de México, está pervirtiendo a la comunicación política del país y está pervirtiendo el ánimo de profunda raigambre en las mejores prácticas de una vida democrática, que deben de tener como respuesta las nuevas generaciones de jóvenes en la amplitud, como ahora les dicen, en las juventudes, hombres y mujeres jóvenes.
La construcción de estos nuevos liderazgos a los que le apuesta Movimiento Ciudadano, cree que va a alcanzar para el Estado de México en 2023 y en 2024 en la sucesión, ¿pero en Aguascalientes?, Anayeli Muñoz es una candidata joven, representa lo que dice, pero, ¿alcanza para esta elección?
Está Anayeli como candidata joven, Biby Rabelo, la presidenta municipal de Campeche muy joven, nuestra coordinadora nacional de diputadas y diputados a la legislatura de los estados, Mónica Magaña, muy joven de veintisiete años, Jorge Álvarez Máynez como Coordinador de la bancada Naranja en la Cámara de Diputados muy joven, con una acción que es muy importante que advierta la sociedad. Valentía, emparejada a preparación, fortalecida por compromiso, todo eso le da un bagaje especial a la construcción de los nuevos liderazgos que está demandando el país.
“Cobro de piso”, la nueva pandemia en la capital
/ DaviD FuenTes
La capital del país no está exenta de la presencia y acción de las bandas del crimen organizado. Son varios los cárteles que operan en la Ciudad de México, y cada vez que las autoridades desarticulan un grupo criminal, de éste surgen varios más en una atomización difícil de perseguir. Tras los confinamientos impuestos por la pandemia y al volver a la normalidad las actividades diarias, los delincuentes vuelven a atemorizar a la población con, entre otras cosas, el cobro de piso para locales comerciales tanto en Polanco como en la Zona Rosa o el Centro y con la extorsión a los transportes públicos en la periferia.
Sobrevivir al confinamiento y al cierre de actividades comerciales durante dos años, a causa de la pandemia, fue el menor de los males para Rodrigo –nombre con el que pidió ser identificado para exponer su caso–; con sus pocos ahorros pagó la renta de su establecimiento, cuentas pendientes y hasta el sueldo de los empleados de confianza del bar que tiene en las inmediaciones de Polanco.
Pero ahora que las actividades económicas están comenzando a reactivarse hay otra pandemia que afecta a los comerciantes de la Ciudad de México: la extorsión aplicada por la delincuencia organizada.
“Aquí no hay de otra: o trabajas con ellos o de plano te van desplazando. En Polanco hay que pagarle a La Unión de Tepito 10% de lo que vendes diario o te queman el lugar. En la Zona Rosa no te piden cuota, pero te dicen que los dejes vender; si aceptas, entonces el lugar es de ellos porque luego de un rato se creen dueños de todo”, explica el empresario que posee dos locales en Polanco, una zona exclusiva de la capital, y quien advierte que denunciar es inútil, porque los delincuentes se enteran de todo.
La situación de miedo e inseguridad que viven los empresarios del ramo restaurantero contrasta con las cifras alegres que dan a conocer las autoridades capitalinas. Para Ismael Rivera Cruces, presidente honorario de la Asociación Nacional de la Industria de Discotecas, Bares y Centros de Espectáculos, el único descanso real que ha tenido el gremio fue durante la pandemia, cuando los delincuentes no los molestaron; pero ahora, una vez que las actividades regresaron a la normalidad, vuelven a padecer el problema.
“Hemos hablado con ellos –las autoridades– del tema de derecho de piso, de las extorsiones; hemos hablado de diferentes formas, en Morelos, la Ciudad de México, el Estado de México, para hacer un programa que pueda erradicar este mal. Pero las autoridades hacen caso omiso. No quieren enfrentar el tema. Nada más nos dicen 'denuncien’, pero al denunciar nos han dejado en la indefensión absolutamente a todos.
“Las autoridades están rebasadas. Nosotros no podemos saber si están coludidas, porque para saberlo necesitamos pruebas y elementos; no los tenemos. El 80% del país tiene temas de derecho de piso. Entonces estamos trabajando para tres personas: para el SAT y los impuestos, para el arrendatario que es el dueño del local y para los derechos de piso. Si tú denuncias, te mata la delincuencia organizada. Y es lo que la autoridad pretende: ellos saben que no se va a denunciar el hecho porque quedamos en estado de indefensión. Y ellos dicen ‘si quieres que actúe, denuncia’: nos echan el peso a los empresarios; un empresario que denuncia tiene casi casi una bala en la cabeza”, dice el restaurantero en entrevista.
TransporTe público
En otro punto de la Ciudad de México, Ramiro, un concesionario del transporte público que opera en Tláhuac, en los límites con el Valle de Chalco, vive una situación similar: entre asaltos constantes y la extorsión de la delincuencia organizada dice que su negocio está a punto de quebrar. Ha denunciado en dos ocasiones. Aunque las autoridades detienen a los responsables, los sospechosos regresan a sus actividades criminales a los pocos meses, ya que las víctimas tienen miedo de ratificar sus denuncias.
“Ya hemos denunciado y en la Fiscalía nos piden que prácticamente los señalemos mirándolos a los ojos… y eso no se puede. Esos cuates no pasan ni medio año en la cárcel, salen y te quieren cobrar del abogado, de lo que pagaron ahí adentro y de todo. Entonces sale peor y no nos queda de otra más que pagarles”, comenta el transportista.
Incluso en los momentos más candentes de la pandemia, cuando las restricciones de movilidad se intensificaron y la economía familiar recibió duros golpes, Ramiro no dejó de pagar el “derecho de piso”. Quien se negaba sufría las consecuencias: en esa línea que atraviesa el Valle de Chalco, el año pasado fueron asesinados dos choferes del transporte público.
Para Francisco Rivas, director general del Observatorio Nacional Ciudadano, el crecimiento de la extorsión y otros negocios relacionados con la delincuencia organizada es parte de la atomización y la formación casi inmediata de nuevos grupos criminales; aunado a eso, la falta de operativos de inteligencia y un verdadero trabajos institucional ha derivado en el alza de los delitos que van desde el robo hasta los homicidios dolosos.
“Hoy realmente el gran negocio de la delincuencia está, precisamente, en la extorsión, en varias formas de extorsión: tanto las formas presenciales, es decir, lo que conocemos como derecho de piso, como otras formas que tienen que ver con los engaños telefónicos, con los fraudes cibernéticos y con otras formas de extorsión, que cada vez están fuertes, que tienen que ver con el control, por ejemplo, de los mercados lícitos.
“Para hacerle frente se necesitarían primero líneas de denuncia, en donde así se garantiza completamente la secrecía y la salvaguarda del denunciante, y estrategias que vayan más allá y que sean menos confrontativas. Yo creo que la mejor estrategia de todas es precisamente la de perseguir el recurso económico y tener en los antros usuarios simulados, es decir policías encubiertos, que, cuando detecten que hay venta de drogas, vayan.
“No he visto una respuesta institucional que sea particularmente eficaz en ninguna parte del mundo en el caso de los antros; evidentemente hubo una disminución de ese tipo de extorsión durante la pandemia, porque los antros estaban cerrados, pero con el regreso a la normalidad ya estamos en los niveles de delitos previos al inicio de la jornada de la sana distancia. Aquí me refiero a todos los delitos, no nada más la extorsión”, puntualiza el especialista.
/ sara panToja
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México presumió recientemente que los delitos de alto impacto en la capital se habían reducido 58.8% en un año. Pero capitalinos entrevistados por este semanario narran sus experiencias como víctimas de la delincuencia y afirman que incluso los policías sugieren, esgrimiendo toda clase de pretextos, que no se levanten denuncias ante el MP, por lo que las cifras de Claudia Sheinbaum quedan muy mal paradas, incluso si se comparan con la encuesta sobre inseguridad del Inegi.
La reducción de 58.8% en los delitos de alto impacto en la Ciudad de México, que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbuam, presumió el pasado martes 17 ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, contrasta con la realidad que a diario viven los capitalinos víctimas de robos, extorsiones y otros hechos violentos que, además, no denuncian por desconfianza en la autoridad y por miedo a represalias.
Esa inseguridad es uno de los temas que más importan a los habitantes de la capital mexicana, que parece que la morenista evade y que podría ser un obstáculo para sus aspiraciones presidenciales en 2024, según José Antonio Ortega, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal.
Capitalinos entrevistados por Proceso cuentan, con coraje y frustración, las experiencias que vivieron a manos de la delincuencia, lamentan que la mandataria local no quiera ver esa realidad y, de paso, denuncian que policías preventivos y de investigación los han convencido de no denunciar los delitos ante el Ministerio Público, lo que significa que éstos no existen en las cifras oficiales.
La noche del pasado 17 de abril Bruno caminaba por la lateral del Circuito Interior, antes de llegar a la calzada Zaragoza, en la alcaldía Venustiano Carranza, cuando dos sujetos lo sorprendieron por la espalda. Uno le puso una navaja en el cuello y el otro le esculcó los bolsillos y la mochila. Al forcejear, el del arma lo hirió en la clavícula. Él se defendió, lo tiró y golpeó al otro, pero el primero le enterró la navaja en el hombro.
Con la cartera, el teléfono celular de Bruno y 80 pesos como botín, los delincuentes lo empujaron y huyeron. Por fortuna había policías cerca que reaccionaron al llamado de auxilio del joven. Le prometieron buscar a los ladrones en el sistema de videovigilancia, mientras llegaba la ambulancia.
“Me dijeron que no había ninguna disponible. Ellos no traían ni una venda, tuve que comprar una toalla sanitaria en la farmacia para detener la sangre. Tras la espera, mi mamá llegó en su coche y me llevó a un hospital”, cuenta. Luego, recuerda que los policías le ofrecieron acompañarlo al Ministerio Público para denunciar el delito, pero con una “advertencia”:
“Cuando salí de trabajar, me tomé una cerveza con unos amigos y traía otra en la mochila. Los policías me dijeron que si denunciaba, el MP me la iba a voltear por ir alcoholizado en la vía pública o me inventaría que yo participé en una riña callejera y que por eso me podrían sancionar doble. La verdad es que con esos comentarios, ya ni fui a denunciar”.
Una noche de febrero pasado, Karla –como pide ser llamada, por temor a represalias–, fue víctima de una extorsión conocida como “montachoques”. Regresaba cansada de trabajar en Hidalgo. Un compañero manejaba su auto y otra iba en el asiento de atrás. Al circular sobre Insurgentes, a la altura de La Raza, alcaldía Gustavo A. Madero, un coche negro se les cerró y provocó que el conductor diera un “volantazo” y le pegara a otro que circulaba a la par.
Tras el “percance”, ella y sus acompañantes se detuvieron para ver los daños, sin notar que el segundo auto ya traía varios golpes más. El conductor de éste les reclamaba cuando llegó otro coche del cual bajaron cuatro sujetos más. “Traían cara de maleantes, pensamos que nos iban a asaltar”, narra. El conductor “afectado” les exigió 12 mil pesos para solucionar el problema. Tras varios minutos de negociación, quedaron en 7 mil. La compañera de Karla les dio sus números telefónicos, nombres y hasta el lugar donde trabajaban, a modo de garantía del pago.
Tras el susto, la víctima le contó el hecho a un comandante de la Policía de Investigación que conoce y éste le aconsejó no denunciar. “Me dijo que como los delincuentes ya tenían nuestros datos, podrían tomar represalias y que ni iba a pasar nada, porque esos extorsionadores sólo son un pedacito de un grupo grande de delincuencia organizada y que sólo me iba a exponer, que mejor ya lo dejara por la paz”, asegura.
Hace unos días Juan Carlos fue testigo de un asalto a un joven en la avenida Francisco del Paso y Troncoso, cerca de la estación del Metro Iztacalco, en horas de la tarde. “Eran varios en bicis, no tenían ni 17 años. Rodearon al chavo que iba cruzando la calle, lo esculcaron, lo patearon y le robaron el celular. Le avisé al señor de la tienda que está al lado y éste llamó a una patrulla, pero se tardó en llegar”.
Estudiante de derecho, le recomendó a la víctima denunciar aquel robo con violencia, pero ésta no quiso, le dijo que no serviría de nada. Recuerda que antes del gobierno de Sheinbaum cerca de ese punto había una estación de policía, “pero la quitaron para poner un Pilares” (Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes). Luego, reflexiona: “¿Cómo es posible que el presidente diga ‘abrazos, no balazos’, si a los delincuentes no les interesa? ¡Al contrario, les vale y nos disparan!”