12 de octubre: Festival para el monumento de Antoñete En profundidad: Curro Vázquez
Revista o�cial del abonado de Las Ventas Nº 50. OCTUBRE de 2025
4. Reseñas de la TEMPORADA
23. PRESENTACIÓN FESTIVAL 12-O
16. Entrevista AGUSTÍN DÍAZ YANES
28. Entrevista CURRO VÁZQUEZ
36. DECLARACIONES MORANTE
45. Entrevista SERGIO RODRÍGUEZ
39. VIAJE ABONADOS
49. ACTUALIDAD FERIA DE OTOÑO
Edita Departamento de Comunicación PLAZA 1
Obra de portada
Juan Iranzo
Fotografías
Alfredo Arévalo
Ziklix
CGB Comunicación Digital
Diseño y maquetación
Juan Iranzo
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Vuelta al ruedo para Villita en el arranque de septiembre
Villita
dio una vuelta al ruedo tras la lidia del tercero de la tarde en la novillada que abrió los festejos del mes de septiembre en Las Ventas. Jesús Ángel Olivas escuchó palmas con el primero de su lote y Aitor Fernández, que hacía su presentación, resultó silenciado. Se lidiaron novillos de Hnos. Sánchez de León (1º y 2º bis), La Machamona, Jiménez Pasquau, Los Eulogios y Toros de Brazuelas.
DE LA TEMPORADA
7 de septiembre, novillada con picadores
Se lidiaron novillos de Hnos. Sánchez de León (1º), Hnos. Sánchez de León (2ºBIS), La Machamona (3º), Jiménez Pasquau (4º), Los Eulogios (5º), Toros de Brazuelas (6º)
El 1º, palmas; el 2º BIS,silencio; el 3º, palmas; el 4º,palmas; el 5º, silencio y el 6º, silencio.
7.526 espectadores
Jesús Ángel Olivas, palmas tras aviso y silencio tras aviso.
Aitor Fernández, silencio y silencio. Villita,vuelta al ruedo y silencio.
El tercero fue un novillo cumplidor de La Machamona con el que Villita dejó lo mejor y más rotundo de la tarde. Llegó mucho a los tendidos en los primeros compases de la faena en dos buenas tandas con la diestra. Una labor corta pero de buena expresión y concepto. Tras estocada y petición, dio una vuelta al ruedo. El sexto, de Toros de Brazuelas, no le ayudó.
Jesús Ángel Olivas consiguió buenos momentos en su lote de Hnos. Sánchez de León y Jiménez Pasquau. Dejó naturales sueltos y buenas tandas con la diestra, en dos labores de mejor intención que resultado. Aitor Fernández lo intentó en el lote de menos opciones.
Saludos para Juan de Castilla en el desafío de Rehuelga y José Escolar
Juan de Castilla saludó una ovación tras la lidia del tercero en el primero de los desafíos ganaderos del mes de septiembre celebrado en Las Ventas. Sebastián Ritter escuchó palmas en su primero y Miguel Andrades, que confirmaba su alternativa, fue silenciado en sus labores. Se lidiaron toros de Rehuelga (1º, 2º y 3º) y de José Escolar (4º, 5º y 6º).
DE LA TEMPORADA
14 de septiembre, corrida de toros
Se lidiaron toros de Rehuelga (1º, 2º y 3º) y Toros de José Escolar (4º, 5º Y 6º).
El 1º, palmas; el 2º, silencio; el 3º, pitos; el 4º,silencio; el 5º, silencio y el 6º, palmas.
8.166 espectadores
Sebastián Ritter, palmas y silencio. Juan de Castilla, saludos y silencio. Miguel Andrades, pitos tras dos avisos y silencio.
Juan de Castilla cuidó mucho al tercero de Rehuelga en la muleta ante su falta de poder. A base de mucho querer, temple y con las alturas y los tiempos, consiguió el colombiano tandas muy meritorias por ambos pitones. Saludó ovación. El quinto fue un toro reservón de Escolar que le costó mucho tirar para adelante y que no le ayudó al triunfo.
Sebastián Ritter dejó lo mejor ante el segundo de Rehuelga, un toro noble pero falto de emoción. Correcto estuvo el colombiano, consiguiendo buenos momentos con la diestra. El cuarto de Escolar fue muy difícil y hubo que tirar de garra. Miguel Andrades estuvo dispuesto en la tarde de su confirmación, aunque no consiguió obtener lucimiento en sus labores.
Estamos frente a Las Ventas. Entra, siéntate y disfruta. Lo difícil será elegir solo un plato.
Calle Julio Camba, 7
ESPECTACULARES IMÁGENES DE LOS TOROS DE JOSÉ ESCOLAR Y REHUELGA EN SU DESEMBARQUE
Luis Gerpe y Partido de Resina se llevan el segundo desafío; herido Serafín Marín
DE LA TEMPORADA
21 de septiembre, corrida de toros
Se lidiaron toros de Partido de Resina (2º, 3º Y 4º) y Monteviejo (1º, 5º Y 6º)
El 1º, silencio; el 2º, palmas; el 3º, palmas; el 4º,ovación; el 5º, silencio y el 6º, silencio.
8.236 espectadores
Serafín Marín, herido
Juan Pablo Sánchez, silencio, silencio y silencio.
Luis Gerpe, saludos, vuelta al ruedo y silencio.
Luis Gerpe dio una vuelta al ruedo y saludó una ovación tras la lidia del segundo y del cuarto toro de Partido de Resina en el segundo desafío ganadero del mes de septiembre celebrado en Las Ventas. Fue una tarde condicionada por el percance de Serafín Marín, herido de gravedad en el recibo de capote al abreplaza. Juan Pablo Sánchez fue silenciado en sus labores. Se lidiaron toros de Partido de Resina (2º, 3º y 4º) y Monteviejo (1º, 5º y 6º).
El cuarto, de Partido de Resina, fue un toro de preciosa lámina y buen comportamiento que permitió a Luis Gerpe dejar lo mejor de la tarde. Realizó una faena de mucho mérito con el viento como protagonista. Consiguió buenos momentos con la diestra que reconoció el tendido. Fue una labor de firmeza ante un importante Partido de Resina. Tras la estocada y la petición, dio una vuelta al ruedo. Una ovación lo saludó tras la lidia del segundo, del mismo hierro. Un toro que embistió a media altura pero al que entendió Gerpe, sobre todo por el pitón derecho, por donde también dejó momentos de conexión. El sexto, de Monteviejo, fue un toro con mucho peligro en el que el toledano no pudo más que mostrarse voluntarioso.
Juan Pablo Sánchez mostró una digna imagen ante sus tres toros. Complicado y de muchas teclas fue el primero de Monteviejo, toro que mató por el percance de Serafín. En el tercero, de Partido de Resina, dejó buenos momentos al natural. El quinto de Monteviejo tampoco le dio opciones.
LOS TRES TOROS DE PARTIDO DE RESINA FUERON APLAUDIDOS EN EL DESTACÓARRASTRE. EL Nº44, 'ROSALERO', LIDIADO EN CUARTO LUGAR.
ENTREVISTA A AGUSTÍN DÍAS YANES
Por LUCAS PÉREZ ESTÉVEZ Fotos cedidas EL MUNDO
“Antoñete era excepcional; es el torero que más gente del cine he visto arrastrar a una plaza de toros”
Cuando hace 8 años estrenó ‘Oro’, rodada en parte en la finca de Morante de la Puebla, Agustín Díaz Yanes estaba convencido de que con esa película se cortaría la coleta. Pero no. Casi una década después, convencido por su productora, ‘reaparece’ con un filme apasionante, ‘Un fantasma en la batalla’, que trata sobre una infiltrada de la Guardia Civil en la banda terrorista ETA y en la que no faltan los guiños al toreo. Aficionado por los cuatro costados, el cineasta, hijo del cuerpo, cuenta que durante el rodaje tuvo que desconectar del toro para no pasarlo mal sin poder disfrutar de su gran pasión. Ahora, su trabajo vuelve a las salas y él, a las plazas. Y a las tertulias. Porque si algo le gusta a ‘Tano’ es hablar de toros.
Tras el estreno en el Festival de San Sebastián y en las salas de cine, las críticas de ‘Un fantasma en la batalla’, su nueva película, no pueden ser más positivas...
Estamos muy contentos. Es tan difícil que te salga una película medio bien… Es como completar una faena redonda, siempre hay un momento en el que se puede venir abajo…Pero en esta película parece que hemos hecho las cosas bien, que es lo importante, y estoy muy satisfecho con el resultado.
Han pasado ocho años desde ‘Oro’.
Sí, y creía que no dirigiría nunca más, pero fue mi productora Belén Atienza la que me convenció. Yo pensaba ya solo en escribir, porque estaba mayor y no quería hacer otra cosa. Lo de dirigir me preocupaba, sobre todo dirigir en malas condiciones. Entonces ella me llamó y pensamos en este proyecto. Sinceramente, me ha alegrado mucho volver, estaba un poco asustado, pero ahora estoy muy feliz.
Además, el rodaje ha sido duro, con localizaciones de muy difícil acceso…
Hicimos 79 localizaciones, lo cual significa que, dividido por jornadas, teníamos que hacer dos al día. Eran localizaciones muy
bonitas, porque estábamos en San Sebastián y en el sur de Francia, pero cada vez que tenías que coger el coche eran por lo menos dos horas para llegar de una localización a la siguiente. Además, muchos días diluvió, que vino bien para la película porque le dio un tono muy bonito a la fotografía, pero también dificultó el rodaje.
Pero quizá lo peor del rodaje no fue eso, sino que le impidió ir a los toros casi una temporada completa… Por supuesto, no pude ir a casi ningún sitio. Cuando me pasa eso, intento quitarme el mono. Mi amigo Maxi Pérez, tu hermano, me mandaba resúmenes de vídeo de muchas corridas, pero algunas veces ni los veía. Intenté quitarme los toros de la cabeza para no pasarlo mal, para desconectarme del todo.
Tiene que ser duro, porque le he escuchado decir que entre cine y toros se queda con los toros…
Bueno, es que ir a los toros es lo que más me ha motivado de las cosas que he hecho en mi vida. Hoy en día veo mucho más cine que toros porque el cine lo ves en la televisión. Y ahora, porque además los toros no tienen canal. Eso sí que ha sido una catástrofe, sobre todo para gente como yo, que tiene otras ocupacio-
nes. O para la gente mayor, los jubilados, que no pueden ir a la plaza… un desastre.
¿Entonces fue una liberación acabar el rodaje y volver a los toros?
Sí, pero también te voy a decir una cosa: con la edad cada vez me cuesta más ir a las plazas de toros. Primero porque creo que el público ha cambiado y es un público un poco más pesadilla que el que era antes; después porque las plazas se me están convirtiendo en lugares muy incómodos para los que ya nos cuesta mucho subir las escaleras; y también por otra cosa, que Zabala de la Serna lo dice mucho en sus crónicas: un día una corrida va a durar seis horas. No sé, creo que los profesionales deberían tener en cuenta eso en algún momento. Yo comprendo esta cosa que han dicho, que al toro hay que ir lento y salir "Hoy ves un vídeo de Paco Camino y dices: ‘Este toreaba como se torea ahora, pero mejor"
lento, pero como decía Ángel Luis Bienvenida: ‘Maestro, no tan lento’. Se entretienen mucho en todo. Antoñete decía: ‘¿por qué miran tanto la muleta cuando van a cogerla si es la suya?’ Se tarda mucho en todo, les dan avisos toreando, en fin, muchas veces cuando llega el tercer toro ya está uno exhausto. Eso es algo que hay que revisar porque no pueden durar tanto.
Vamos al origen. Su padre fue el extraordinario banderillero Agustín Díaz, ‘Michelín’. Que le gustasen los toros, no es de extrañar teniendo en cuenta que se crió entre trajes de luces.
Sí, pero ya sabes que puedes nacer en una familia taurina, que tu padre puede ser torero como en mi caso, y puede ser que después no te gusten los toros. Por ejemplo, en mi familia, a mi hermano le gustaban pero no como a mí, y a mi hermana no le gustaban mucho. Eso te influye si quieres que te influya y si te gusta.
¿Cómo recuerda aquella época? Mi padre toreaba tanto que hasta que no se retiró tuve poca oportunidad de escucharle hablar de toros. Pero una cosa muy buena de vivir con un torero así es que oyes hablar de toros a los toreros. Y entonces, si te quedas callado y escuchas atentamente, aprendes mucho. Es la historia oral del toreo, que es muy bonita. Porque en realidad, la historia oral del toreo se hace en las tabernas, en las conversaciones, en las tertulias… Ahí es donde se va transmitiendo la historia del toreo, yo creo que más que en los libros. Esa tradición oral ahora se está perdiendo un poco, pero en mi época se juntaban en un sitio que se llamaba El Trébol, se jugaba al dominó y de repente empezaban a hablar, por ejemplo, de Domingo Ortega. Entonces, ponías la oreja y aprendías.
¿Cuáles son sus primeros recuerdos de una plaza de toros?
Mi primer recuerdo de una plaza de toros lo tengo en Zaragoza. Curio-
samente, mi abuelo materno era un enamorado de los toros y quiso ser torero. Tenía abono allí con mi otro tío, también materno, y mi otro tío abuelo, y me llevaron a los toros. Y después, la plaza en la que he visto más toros ha sido en Málaga.
¿Y qué le contaba su padre de Manolete?
En mi casa solamente había un retrato de un torero y era de Manolete. Mi padre era un gran manoletista, como todos los de la época que toreaban con él. Yo soy manoletista total. Después, como mi padre tuvo la suerte de ir con toreros tan buenos, pues les he conocido, les he oído hablar y he hablado de ellos. Mi padre ha ido con Antonio Ordóñez, con Paco Camino, con Gregorio Sánchez, con Manolo González, con Parrita, con Jumillano... Con todos esos toreros, unos con mayor intimidad que otros, he tenido relación y eso te hace aprender mediante uno de los ritos del toreo y del buen aficionado: estar callado, escuchar, no meter mucho la pata, ni empezar a decir tonterías delante de un matador de toros.
¿Y usted no pensó nunca seguir los pasos de su padre?
Sí, pero no servía. A mí me ocurrió lo que le ocurre a todos los bobos, que es que el primer día que fui a un tentadero, salí a una vaca y estuve enorme. Todo el mundo me lo cantó. Entonces yo mismo pensé que ya era Paco Camino. Después, la segunda vez fue un desastre. Y la tercera, otro desastre. Y la cuarta, otro desastre peor... Yo creo que mi padre me iba subiendo el volumen de las vacas, y cuando ya subió a un nivel que no me convenía, dije, ‘oye papá, esto no me interesa mucho’. Además estaba estudiando Filosofía y Letras.
Y entonces, ¿el cine?
El cine me vino un poco rebotado, no te creas tú que yo pensaba que iba a hacer cine, pero, estando estudiando, tenía un amigo que escribía guiones y me dijo, ¿por qué no escribimos un guión juntos? Y ahí fui metiéndome poco a poco. No soy de esos que desde los 15 años se compró una cámara o le robó la Super8 al padre y se dedicó a rodar. No, yo pensaba más bien que iba a ser profesor, que es lo que fui, pero poco a poco me fui derivando al cine.
Y sin embargo, con esas dos pasiones como forma de vida siempre ha defendido que hacer una película de toros es muy difícil ¿Por qué?
Para mí sí, yo no lo haría. Bueno, es que no lo voy a hacer. Todavía un documental…Que ahora se confunde mucho entre lo que es un documental y una película. Un documental me atrevería hacerlo, pero tampoco tengo ningún interés a no ser que fuera una cosa muy especial. En realidad, para hacer una película de toros tienes que hacer un documental, que es lo que pasó en ‘Torero’, de Carlos Velo, con Luis Procuna: sigues a un torero y entonces las imágenes son reales. Y también pasa una cosa, me gusta más ir a los toros, ver los toros, estar con vosotros después de los toros, hablar de toros, que ponerme a hacer una película de toros.
Usted ha dicho que el toro no es un actor y los actores que hacen de toreros no resultan.
Los actores no pueden hacer de toreros, es imposible. Tú ves a un actor, pero al mejor actor, ¿eh?, ponerse un vestido de torear y...no. Y ya coger un capote o una muleta…es imposible.
Sin embargo, ¿cree que algún torero tiene dotes como actor?
Yo creo que los toreros son actores en general. Hay toreros que actúan con arreglo al público, tienen una gran exposición. De hecho, fíjate la cantidad de películas que se hicieron sobre El Cordobés, que era un actor nato, sobre Camino, sobre Mondeño. Y no están nada mal. Les doblaban la voz, cosa que me pareció siempre un horror, pero bueno. Al torero tampoco le vas a meter en grandes dotes interpretativas. El torero que mejor he visto en una película fue Miguelín, en la de Francesco Rossi, ‘El momento de la verdad’. Miguelín, era muy guapo, muy desenvuelto, parecía un actor italiano. Pero es difícil porque los toreros viven en un mundo muy particular, muy suyo, y entonces sacarlos de ahí y ponerlos delante de una cámara, no sé, es complicado.
Entonces, si le pregunto por la mejor película que se ha hecho de toros…
‘Torero’, de Carlos Velo, porque en la de Miguelín Francesco Rossi se quiso meter en esta cosa filosófica
de la muerte y entonces le salió bien el Miguelín actor pero no el Miguelín torero.
Pese a todo, en sus películas siempre ha habido guiños…incluida la última.
Sí, en ‘Un fantasma en la batalla’ aparece un cartel de un festival en Osuna y se lee el nombre de Curro Vázquez. En otras películas también, claro. En ‘Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto’ el marido de la protagonista era banderillero y, fantasiosamente, él era el tercero de Curro Vázquez.
Hay una anécdota preciosa en ‘Alatriste’ cuando Viggo Mortensen se pone a preparar su papel.
Así es. Viggo me preguntó, ‘Oye, ¿tú cómo crees que andarían los espadachines en aquella época?’ Yo dije, ‘Viggo, no tengo ni puta idea, pero lo más cercano que yo creo que te puede servir son los toreros, que andan muy bien’. Y entonces le llevé a los toros, aquí a Las Ventas, con Curro Vázquez. Después estuvimos cenando y yo me di cuenta que Viggo, con lo educado que es, estaba todo el rato mirando a Curro, cómo se movía en el bar, cómo se levantaba, cómo se expresaba… los toreros tienen una forma distinta de hacer todo y él cogió muchas de esas cosas. Se hicieron muy amigos.
Y en ‘Oro’, Morante…
Eso fue la leche. Estábamos localizando en La Puebla del Río y pensé si llamar o no a Morante, porque no le quería molestar. De repente vimos unos árboles preciosos en el río y me dije, esto es perfecto para rodar. Al volverme vi que era su casa. Entonces ya le llamé y se portó como Dios. Nos pasó una cosa curiosa porque en el rodaje había gente antitaurina y él nos puso el comedor de la casa a nuestra disposición. Allí tiene colgados los toros, y entonces los miraban de aquella manera… Pero fue aparecer Morante y se calmó el mundo, porque le ves entrar y es diferente a todo. Yo le estoy súper agradecido porque fue de una generosidad total e invadimos su casa tres días.
res y directores que nos lo han pedido. Te diré que cuando la revolución antoñetista muchos me pidieron ir a los toros. Todos querían ir a ver a Antoñete. Y era difícil porque cuando toreaba él estaba lleno hasta la bandera. Antonio es el torero al que más gente del cine y de la literatura he visto arrastrar a la plaza en esa época.
¿Ha conocido toreros cinéfilos?
Sí, Enrique Ponce es muy cinéfilo, pero cinéfilo de verdad, iba todos los fines de semana al cine y sabe mucho. Cayetano también, de hecho, estudió cine.
“El mejor torero al que he visto actuar ha sido a Miguelín y la mejor película de toros, ‘Torero”
Por hacer un guiño con la película, usted ha dicho que no hay nada más solitario que ser un infiltrado en un grupo terrorista. La soledad que, precisamente, acompaña siempre al torero…
Hablando de actores, ¿ha podido compartir tendido con algún otro actor?
Sí, hemos llevado a muchos acto-
Así es. Creo que el toreo es la profesión más solitaria de todas, el torero vive una soledad siempre muy grande. Una figura torea 60 corridas de toros en España y 20 corridas de toros en América, por ejemplo... Y todos los días es lo mismo: el hotel, la soledad, el cigarrito, el no sé qué, y no sabiendo nunca cuándo te puede coger un toro y quitarte del medio. Esa cosa de dominar tu miedo durante casi 100 días al año me parecía una tarea absolutamente increíble. Porque además hay una cosa que casi nadie piensa, los niños sienten miedo de todo. Bueno, pues a los toreros les quitan el miedo al toro a los 9 o 10 años cuando empiezan porque si no, no sigues. Y entonces eso les convierte en unas personas muy raras. También los toreros de jóvenes, están siempre rodeados de gente adulta. Y entonces se convierten en gente muy metafísica.
Usted, que ha vivido distintas épocas, ¿qué momento cree que vive
el toreo hoy en día?
Creo que estamos viendo el mejor toro de la historia y a veces hay toros que torean mejor que algunos toreros. Con este toro tienes que torear muy bien, muy bien para que ocurra algo interesante. Antes el toro no era ni de lejos como el de ahora. Te hablo de la época de Camino, El Viti, Ordóñez… ¿Qué ocurría? Que ahí cabían muchos toreros, porque los toreros de valor con ese toro te la formaban, era brutal. Y los toreros muy buenos le pegaban fiesta al toro medio, al malo…
¿Había más competencia?
Sí, claro. Es que antes había muchos estilos. Tú tenías de figurón del toreo a Diego Puerta, junto a Camino y El Viti, y junto a El Cordobés, todos con estilos muy diferentes. Y después tenías otros toreros ocultos y, digamos, extraños, que no se sabía muy bien por qué no habían triunfado brutalmente, pero que triunfaban de repente. Antoñete, Gregorio Sánchez, Fermín Murillo…. Siendo menos estilistas, el toro los convertía en algo especial. Como decía Parrita, de cintura para abajo todo es del toro. Y eso era el manoletismo, la muleta aquí puesta -se señala la barriga-, lo que creaba una emoción terrible.
Era una época donde los toreros ‘cobraban’ mucho, ¿no?
Muchísimo. Diego Puerta se llevó 52 cornadas. Camino, que era el torero más inteligente, el más dominador, tuvo 14 cornadas, dos de ellas de extremaunción. Había muchas sustituciones y eso también hizo figura a muchos toreros. El toro de entonces cogía mucho y volver a ese toro ahora es imposible. Yo recuerdo que Antoñete, que fue un torero extraordinario y sabio, dijo que él volvió porque el toro había cambiado, que con el toro de su juventud nunca habría podido volver.
¿Hemos evolucionado a peor en ese sentido?
Yo creo que los toros ahora son menos emocionantes. Antes había más competencia y también los toreros duraban menos. Duraban 5, 6, o 7 años, no podían resistir más a ese ritmo. Eso es que les cogía mucho el toro. Por ejemplo, mi padrino Manolo González duró 5 o 6 años. Era muy valiente, se ponían muy cerca y los toros no respetaban. Es verdad que
los toreros de ahora muchos te dicen que entonces no se tenía la técnica de ahora. Que es verdad. Antes dejaban, como dicen los toreros, mucha ventana... Pero yo creo que la mezcla del toro de ahora con la técnica de ahora va a crear muchos problemas para el futuro porque hay una cierta uniformidad del toreo y solamente tres o cuatro, que torean como Dios, se salvan de esa uniformidad.
Con Morante se ha reabierto el debate sobre el mejor torero de la historia. ¿Cree que lo hay? Y si lo hay, ¿es Morante?
Eso es una imbecilidad, primero porque nadie ha visto a todos los mejores toreros de la historia. Es decir, si tú le preguntabas a mi padre, te iba a decir que los mejores toreros de la historia eran Manolete, Antonio Ordóñez, Camino o Domingo Ortega, que era Dios para los toreros de esa época. Cada uno puede opinar de lo que ha visto. Morante es un torero extraordinario. ¿El mejor de la historia? Pues no lo sé, pero sí que creo que es un torero que hubiera sido figurón del toreo y un torero extraordinario en todas las épocas del toreo, es un torero con una capacidad especial
¿Y al revés? ¿Qué torero de otra época hubiera sido figura hoy?
Manolete por supuesto. Tú ves un vídeo de Manolete y dices, este tío es moderno. Pero yo creo que el torero que más se acerca a la tauromaquia moderna es Camino. Tú ves sus vídeos y dices, ‘este toreaba como se torea ahora, pero mejor’. Pero, por ejemplo, a un torero extraordinario como Ordóñez el vídeo no le hace justicia. Por eso decía que lo de mejor torero de la historia... Eso es una tontería moderna, que lo hacen ahora con todo, las 100 mejores películas de la historia, las 100 mejores sillas de la historia, y además siempre se equivocan, porque después pasan 20 años y ha cambiado todo.
¿Es mejor entonces centrarse en lo que a uno le gusta y alejarse de pódiums, de estadísticas y de ránkings?
Totalmente, porque además mira, para mi un torero esencial en mi vida ha sido Curro Vázquez, que no ha sido un torero de continuación; otro torero que me ha encantado también ha sido Rafael
de Paula, y pasa lo mismo. El año pasado, cuando acabé la película, me puse a ver toros. ¿Sabes con qué me quedo? Con Uceda Leal pegando tres naturales a un toro en Madrid. Lo ves y dices, para esto soy aficionado. Lo que hizo Uceda con ese toro todavía tengo en la cabeza. El aficionado a los toros tiene que tener capacidad para la sorpresa y para catar el buen toreo.
Amplitud de mente como aficionado, se dice.
Yo creo que el toreo tiene que ser más libre para mirar. A mi me gusta el toreo bueno pero con una de las faenas que me quedaría es una de Manili a un miura en Madrid. La vi de pie con mi mujer y era impresionante ver a ese hombre con ese toro, exponiendo, templando… Era increíble. Para que veas que no siempre se trata de buen toreo. Se trata de emocionarse. Hoy en día eso también se está uniformizando pero el otro día por ejemplo lo hizo David de Miranda, que en Málaga pegó un zapatazo bueno. En fin, el toreo tiene que tener ida y vuelta.
Me ha hablado poco de otro de sus predilectos, Antonio Chenel Antoñete, muy de actualidad este Otoño por el Festival potenciado por Morante para levantar un monumento en su honor en Las Ventas. Antoñete, fue un torero para mi gusto excepcional y creo que a un toro era el que mejor le toreaba junto con Ordóñez y Camino. Pero es que aparte de todo eso, que ya es mucho, para mi gusto, era un ser extraordinario. Es una de las personas más importantes que he conocido en mi vida. Era un tipo de una inteligencia natural increíble, de una elegancia natural increíble, un amigo fantástico y una persona que te encantaba oírle, escucharle, no sólo de toros, que eso era maravilloso, sino de cualquier cosa. Un melancólico. Él era un gran admirador de Rafael Ortega, que es verdad que era un torero extraordinario. Pasabas unas noches fantásticas con Antoñete, al que por cierto también le gustaba mucho el cine. Yo he aprendido mucho de los toros y de la vida con él. Un tío extraordinario al que echo mucho de menos. Después me pasó con Enrique Ponce, que es un tío muy amistoso, muy listo, una mente privilegiada. Y también
muy buen amigo, una persona muy buena.
Se habla poco de toros… Bueno, es que se han ido muriendo los que hacían las tertulias. Esas tertulias en mi época se hacían en torno a algo o a alguien. Y había mucho respeto para los toreros que hablaban. Un día quedé impresionado escuchando hablar de toros a Pepe Luis Vázquez con mi padre en Málaga. Conocí hablando de toros también a Ángel Luis Bienvenida, increíble, Antoñete, increíble también, y a Curro Vázquez, que yo creo que es el mejor conversador de toros que hay ahora mismo porque tiene una concepción del toro y del torero muy bonita para oírlo hablar.
Pongamos que habla de Madrid... Pues mira, en Madrid existe una pasión contradictoria. Creo que es la plaza que da el mejor triunfo, ya que, cuando un torero está bien y la plaza se entrega, es muy generosa. Y luego tiene el defecto, que se está acrecentando, que es la mala leche que hay contra toreros que no debes tener... Es decir, no puedes estar todo el día metiéndote con un pobre torero. Las figuras son figuras y tienen que aceptarlo. Pero hay otros toreros a los que tienes que dejar estar. Y creo que tienen que empezar a tener un poco más de apertura de mente con los novilleros porque no pueden llegar aquí los novilleros con ese pedazo de novilladas y exigirles como si fueran figuras. El estilo de los novilleros es el que va a marcar el futuro. Dicho esto Madrid, es mucho Madrid.
¿Ha cambiado el público también?
Esto es la evolución de la sociedad misma. Antes la gente iba a los toros y lo veía como un sacramento, y después había quien se formaba con los periodistas taurinos. Había
más información taurina y tenían más conocimiento. El toreo va evolucionando, la sociedad va evolucionando y los gustos de la gente van evolucionando. Lo raro es que con esta sociedad que tenemos ahora el toreo siga existiendo y estén llenándose las plazas.
Con eso podemos terminar, con los que quieren prohibirlo.
A ver, el toreo es algo muy extraño. Unos señores vestidos muy raros, un toro… Pero hay algo en él, quizá porque es el único espectáculo occidental que es arcaico, que hace que yo creo que se vaya a mantener. Ya sé que es una palabra absurda, pero es que tiene algo mágico. Tú llevas a la gente que no ha visto toros a una corrida y de diez personas, seis se marchan y no quieren saber nada; dos quedan indiferentes pero hay otros dos que se vuelven unos locos de este espectáculo. Entonces hay algo extraño en los toros que yo creo que viene de que es un rito ancestral, complicado de explicar pero fácil de ver si te llega. Y la prohibición que parecía que iba a cuajar, no ha cuajado. Las plazas se han vuelto a llenar y es un espectáculo que se mantiene a sí mismo.
En su argumento veo una reivindicación del toreo como un espectáculo único más que como un elemento cultural…
Es que lo del elemento cultural me parece como una bobadilla. Vamos a ver, yo pertenezco al Ministerio de Cultura como director de cine, pero claro, la diferencia entre Curro Vázquez y yo es que él es torero y yo director de cine. Es abismal. Yo no tengo esa diferencia con un escultor o con un pintor. Creo que la tauromaquia sí que es única. Mientras el público siga pensando que eso es lo que quiere ver, de lo que quiere hablar, y haya personas de muy diferentes ideologías y profesiones
que les guste, entonces el toreo en ese sentido sí será un ámbito de libertad. De libertad, pero no tanto en la plaza, que muchos dicen tonterías. Debían tener cuidado con eso porque, por ejemplo, a mí me va a echar de las plazas como siga oyendo esas cosas que dicen. Nosotros los que nos juntamos después a hablar, somos de diferentes ideologías y nunca ha habido ningún problema y se habla de toros, se habla de la vida, se habla de todo. Si logran no apropiárselo estos tontos, el toreo seguirá. Pero el toreo siempre ha sido un sitio para hablar de toros, un sitio donde no existen ideologías, existen toreros.
Mire, de política no habíamos hablado…
El toreo no admite la política. El toro, para empezar, no sabe que el que sale a torear se llama Morante de la Puebla. Entonces, si el toro no sabe nada de esto para qué vamos a politizar el ambiente. Vamos a dejar que la cosa fluya como ha fluido siempre y lo que no puede ser es que una plaza de toros se convierta en una especie de mitin político horroroso, demencial, terrible e impertinente.
“Antes había más competencia y los toreros duraban menos años; ahora los toros son menos emocionantes”
PRESENTADO EL FESTIVAL para el monumento a Antoñete
La Plaza de Toros de Las Ventas acogió el jueves 25 de septiembre la puesta de largo del Festival taurino que se lidiará en la mañana del 12 de octubre, Día de la Hispanidad, a beneficio de un monumento para Antonio Chenel Antoñete que se instalará en la explanada del coso venteño.
Morante de la Puebla, precursor de la organización del Festival, ha sido el gran protagonista del acto, en el que le han acompañado varios de los compañeros que compartirán cartel con él en una jornada histórica: Curro Vázquez, César Rincón y la novillera Olga Casado. Junto a ellos, han intervenido los empresarios de Plaza 1 Rafael G. Garrido y Simón Ca-
sas, y Miguel Martín, director gerente del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid y también ha asistido Pilar Chenel. El acto ha estado conducido por Carlos Ruiz Villasuso.
"Todo esto no sería posible sin el esfuerzo que van a hacer mis compañeros, es un cartel muy interesante de figuras ya retiradas y van a volver para una obra que se quedará para la historia", explicó Morante. "Monumental era el toreo de Antoñete y todos teníamos que agradecer de alguna forma todo lo que él aportó al toreo, a Madrid, y todos nosotros". Por último, agradeció a la "empresa, siempre dispuesta para que esta fecha estuviera enmarcada dentro
de un día bonito".
"Estoy preocupado e ilusionado al mismo tiempo", afirmó Curro Vázquez. "Tanto César como yo estamos haciendo un gran esfuerzo, pero sabemos que es un esfuerzo que va a merecer la pena", continuó. "Madrid es mucho Madrid, a mi me cambió la vida", advirtió emocionado César Rincón, que pidió el reconocimiento a los presentes para Morante de la Puebla, "ejemplo con la organización de este festival de lo que es él: todo corazón". Finalmente, Olga Casa-
do apuntó el carácter "histórico" de la cita, y cómo siempre ha soñado "con hacer el paseíllo en esta plaza, aunque nunca pensé que la primera vez fuera a ser rodeada de tales maestros".
Rafael G. Garrido, presidente de Plaza 1, tras agradecer el gesto y la idea a Morante, remarcó el gran impacto de la cita, que ya ha colgado el 'No hay billetes', al igual que la corrida de la Hispanidad en la que también actuará Morante. "Será histórica en la historia del toreo y
en la historia de esta plaza, 46.000 personas pasarán por aquí ese día, dejando claro la importancia de la tauromaquia para Madrid y que estamos más vivos que nunca".
Por su parte, Miguel Martín, director gerente del Centro de Asuntos de la Comunidad de Madrid ensalzó la figura de Antoñete: "Aquí vivió, aquí se crió, y qué mejor que este lugar para que tenga una estatua homenaje a todo lo que ha representado para el toreo".
LOS ARTISTAS:
LA PINTURA Y LA OBRA
La pintura de Pérez Indiano, que refleja el rostro de Antoñete flanqueado con el arco de la Puerta Grande de Las Ventas vio la luz durante este acto. También se mostró, de manos del propio Morante y el escultor Martín Lagares, el boceto de la futura escultura que se instalará en la explanada de la Plaza de Toros de Las Ventas.
Feria del Caballo
ENTREVISTA A CURRO VÁZQUEZ
Por GONZALO BIENVENIDA Fotos ZIKLIX
El regreso del ‘Curro de Madrid’ en honor a Antoñete
Nunca se midió a Curro Vázquez por las orejas cortadas ni por el número de paseíllos. Su carrera estuvo por encima de todo eso. Su magisterio ha alcanzado una dimensión prácticamente imposible de conseguir: torero de toreros. La hondura de su capote, la fidelidad a un concepto, la categoría personal y profesional en cualquier circunstancia. A sus 74 años se reencuentra con Madrid con su amigo Antoñete como motivación principal.
Volverá a hacer el paseíllo en la plaza donde sumó 82 corridas de toros y dónde triunfó con el de Salvador Domecq en el 81 y con los Victorinos en el 89. Donde se despidió bajo la lluvia del 94 con aquel Alcurrucén y donde malogró tantas faenas con la espada que quedaron para el recuerdo de los buenos aficionados. A la plaza donde escuchó las broncas más sonoras, donde padeció el percance más grave de su vida, donde se sintió tan querido como exigido.
Siempre esperado. Como ahora le esperan las nuevas generaciones que nunca le ha visto torear, pero que de alguna manera saben que siente el toreo de una manera diferente.
"Le llamé y le dije: me voy a preparar, cuenta conmigo, noté que le dio mucha alegría, esa ilusión suya me ha ayudado a prepararme más a conciencia"
¿Cómo fue la llamada de Morante?
Me hizo una ilusión tremenda. Me contó la idea del festival, me pareció fantástica y rápidamente me ofrecí a acompañar a la familia de Antoñete con la que me une mucha amistad, nunca pensé en pisar el ruedo. Cuando íbamos a colgar José Antonio me dijo que tenía que hacer algo, como si me fuera a ofrecer hacer un quite durante el festival… Quedamos en hablar más adelante, pasé toda la noche preocupado, sin parar de darle vueltas, sin poder dormir, pensé todo lo que podía pasar… me decía a mí mismo qué vergüenza a mi edad… tener que vestirme de corto… ¿y si me caigo y hago el ridículo?
Estuve agobiado sin poder dormir en toda la noche.
Para verlo tan negro se calentó rápido.
A las 9:00 de la mañana lo llamé para decirle que no. Que sin estar preparado no debía pisar el ruedo, que era una locura, que no lo iba a hacer. Estuvimos gastando unas bromas, riéndonos un rato y ya lo dejamos así. Cuando vi la temporada que estaba haciendo y cuando viví las dos tardes de Madrid sabiendo lo que había pasado esa persona, me emocioné. Con la que tenía liada en Sevilla y en Madrid, al día siguiente de abrir la Puerta Grande cuenta en una entrevista su proyecto del festival. Me emocionó toreando y me emocionó su generosidad con Antoñete, que en ese momento de éxito pensara en el homenaje y pensé yo también tengo que hacerlo
por Antonio. Le llamé y le dije: me voy a preparar, cuenta conmigo, noté que le dio mucha alegría, esa ilusión suya me ha ayudado a prepararme más a conciencia.
Dijo pronto que sí, el primero de los toreros retirados.
Lo sentí así, como te he dicho. Pero era importante echarse palante pronto para prepararse lo mejor posible dentro de lo que cada uno puede. Yo me he basado en cómo yo me preparaba y adaptándolo a la edad que tengo ahora.
También ha ido al campo en este tiempo.
Sí, algunos tentaderos pero no con ansiedad de torear mucho. Sobre todo ha sido toreo de salón, y apete-
"Noto que tanto antes como ahora los aficionados me tienen mucho cariño, tanto como yo le tengo a la gente de Las Ventas".
ciéndome, que al estar tan motivado ha sido muchos días en lo que sí he sido disciplinado, ha sido en andar todos los días. Estoy muy ilusionado, merece la pena el esfuerzo que estoy haciendo.
¿Cómo cree que hubiera reaccionado Antoñete?
Estaría muy contento. Mantengo mucho trato con su familia, nos queremos mucho las dos familias. He hablado con todos sus hijos, les llamé uno a uno para contárselo. A Antonio se le quería muchísimo en Madrid, estaría orgulloso de este homenaje. La gente lo apoyaba en los momentos difíciles y en los que estaba bien. Es uno de los personajes
más ligados a la historia de Las Ventas. Todos los buenos aficionados le querían. Era entrañable.
¿Se siente identificado con su tauromaquia?
Tenemos un concepto parecido, por eso yo creo que nos llevábamos tan bien, cada uno con su personalidad, pero entendiendo el toreo de la misma manera. Antonio me llevaba 18 años. Admiraba su colocación, su manera de sentir el toreo, lo bien que le funcionaba la cabeza, lo pronto que veía las condiciones del toro. Tenía mucho conocimiento. Enseguida se daba cuenta del pitón bueno del toro, la distancia, en definitiva, leía muy pronto el compor-
tamiento de los animales. Le tenía mucha admiración y mucho cariño. Sentía que él también hacia mí, me respetaba mucho como torero.
Con el paralelismo de ser ‘toreros de Madrid’.
Los dos dependíamos mucho de lo que ocurriera en Madrid cada año. Nos entendimos muy bien, entre otras cosas también por ese motivo.
¿Ha pensado en algún momento que se ha equivocado?
Las dudas son normales. Nos pasa a todos los toreros y más a mi edad. El humor es cambiante, te hace preguntarte muchas cosas pero siempre llego a la misma conclu-
sión: me sentiría mucho peor en este momento si hubiera dicho que no.
Aunque habla con naturalidad de ello, el trabajo para volver a ponerse delante de un novillo no es fácil.
Volver a ponerse a punto es un proceso que no es fácil ni a nivel físico, ni mental. El cuerpo también se acopla al peso del capote, al de la muleta, a coger soltura en los toques, a la colocación…. todo cuesta, pero desde luego no se me había olvidado, estaba ahí en la cabeza, en cuantito que he empezado, ha salido todo con facilidad.
Ese trabajo psicológico también
es importante porque vendrán a la mente muchos recuerdos.
Sin duda. Eso es lo que más me preocupa, que la emoción no me juegue una mala pasada. Uno imagina ese festival todos los días, me pasaba igual cuando estaba anunciado en las grandes ferias. Me imagino de todo, cada detalle, unos días me sale bien, otro día no me sale nada… otro día me digo ¡qué locura! Por las noches también me pasa, unos días duermo tranquilo, otros emocionado por lo feliz que me siento y otros duermo muy mal…
¿Le supone un hándicap que sea matinal?
Creo que estaré más espabilado que si fuera por la tarde. Lo que más apuro me da es que Morante tiene que torear por la tarde. Le pregunté si buscábamos otra fecha para que no hiciera esa barbaridad y me dijo que no. Con esa manera de sentir el toreo que tiene tan grande, dijo que no le importaba por la mañana y por la tarde.
¿Ha notado diferencia del toro de su época al que se lidia hoy en día? He toreado algún novillito, pero no me he puesto delante de toros. En general, veo que el toro ahora tiene más volumen y, quizás, plantee menos dificultad que antes. También salen toros complicados, pero, en general, creo que el toro de hoy humilla más, tanto el bueno como el malo.
Ha escogido Garcigrande para su novillo.
Precisamente Garcigrande es de las ganaderías que más humillan, confío completamente en Justo Hernández porque es muy buen ganadero. Estoy seguro de que va a poner todo el interés del mundo en que salga bien.
Su carrera encontró esplendor y reconocimiento en su madurez. Su toreo fue cogiendo cada vez más poso por el camino de la pureza, la hondura y el sentimiento. ¿Sueña con que le vean torear así?
Si tengo la suerte de que me embista el novillo puedo pegar 10, 12 o 20 muletazos de la forma que gusta en Madrid. No busco más porque a estas alturas ni me tengo que ganar un puesto en la feria ni me tengo que ganar la siguiente corrida.
Quiero hacer un buen papel, estar a la altura de las circunstancias y de la expectación que ha levantado el cartel.
Las nuevas generaciones se han apasionado con el toreo. En el festival tienen la oportunidad de encontrarse un toreo de otra época.
Me ilusiona mucho eso, cuando veo tanta gente joven que quiere vernos a los que llevamos tanto tiempo retirado. Me lo transmiten sus padres, me encanta. Hay un movimiento en la juventud que se ha aficionado que es buenísimo para la fiesta.
Entre esos jóvenes estarán sus nietos que por razones de edad no le habrán visto torear.
Sí. En estos años, desde que me retiré en Vistalegre 2002 y, después, dejé de torear festivales en 2004, han sido muy poquitas las ocasiones en las que he toreado en el campo, y nunca me habían visto. Hablando con mis hijos, les noté preocupados en los primeros tentaderos que he hecho para prepararme, así que organicé un tentadero cerca de casa con mis hijos y mis nietos para que vieran que resuelvo con facilidad. Se quedaron más tranquilos.
La noticia sorprendería a sus hijos.
Imagínate. Pensaron, como yo, en un principio que era una locura. Después, me han visto prepararme con esa ilusión y por el motivo del monumento a un amigo tan querido y, me han entendido, he sentido su apoyo.
¿Qué es lo que más seguridad le ha dado para afrontar este compromiso?
En el toreo es fundamental las muñecas y la cabeza. Funcionando eso uno está tranquilo. He visto que me encuentro bien para matar el festival. Me ha respondido el cuerpo como esperaba. Siempre he sido responsable, no de entrenar muchísimo pero sí de estar centrado en lo que tengo que estar. Luego saldrán las cosas o no, pero estoy tranquilo por lo que he podido prepararme.
Por encima del resultado, queda el idilio con una afición.
Sí, desde el primer momento la afición de Madrid me apoyó mucho
en los momentos difíciles de mi carrera. Cuando toreaba poco cuajaba un toro y me servía para volver a situarme. He sufrido una cornada gravísima, broncas muy fuertes y también guardo grandes recuerdos. Me llena de satisfacción haber podido torear tanto en Madrid. Noto que tanto antes como ahora los aficionados me tienen mucho cariño, tanto como yo le tengo a la gente de Las Ventas.
Su afición es incombustible, le mantuvo en activo mucho tiempo, es una de las claves de este regreso puntual.
Tuve mucha suerte en conocer a toreros. En fijarme desde niño en los toreros anteriores. Mi padre era muy buen aficionado y me hablaba, entre otros, de Pepín Martín Vázquez. He llegado a torear con toreros de los años 50, de los 60, de los 70, de los 80 y de los 90 hasta primeros de los años 2000. He convivido con ellos en América, he escuchado a toreros anteriores y a mis propios compañeros.
He aprendido de todos.
¿Consiguió su sueño?
De niño quieres torear. Después quieres conseguirlo todo, tener una finca y todas esas cosas. Lo he vivido todo en el toreo, he tenido la suerte de resurgir en momentos en los que estaba hundido. Estoy satisfecho con lo que he conseguido. Sobre todo, porque he hecho lo que más me ha gustado en la vida, torear.
Se dice que usted es ‘torero de toreros’.
Si es que soy torero de toreros, que no lo sé, es algo que me ilusiona cuando me lo dicen porque conseguir el respeto de las personas a las que admiras como son tus compañeros no tiene precio. De cara al festival, he sentido el apoyo de muchos toreros, de mi generación y de la actualidad. Me siento orgulloso de ese cariño que me han transmitido los toreros.
Sus partidarios soñamos con que el novillo del festival le permita
torear a la verónica como acostumbraba estando en activo: con pureza, asentado de plantas, guiando la embestida con el pecho. Este homenaje a Antoñete es la guinda inesperada de una carrera llena de altibajos, pero siempre fiel a unas formas. Curro Vázquez es en el toreo el clasicismo, la bohemia, la pureza, la personalidad y, sobre todo lo demás, el sentimiento.
"He visto que me encuentro bien para matar el festival. Me ha respondido el cuerpo como esperaba".
Morante de la Puebla:
"Monumental era el toreo de Antoñete y todos teníamos que agradecer de alguna forma todo lo que él aportó al toreo, a Madrid, y todos nosotros"
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Medio centenar de abonados de Las Ventas viven una gran jornada de campo con Victorino Martín
Medio centenar de abonados de la Plaza de Toros de Las Ventas disfrutaron el pasado sábado 20 de septiembre de una inolvidable jornada de campo junto a Victorino Martín. La iniciativa partió de un sorteo realizado por Plaza 1 entre todos sus abonados al cerrarse la venta de abonos de la Feria de Otoño, y se ha podido llevar a cabo gracias a la colaboración de Victorino Martín, pionero en el impulso del turismo taurino al ofrecer experiencias únicas que combinan tauromaquia, gastronomía y naturaleza. Los aficionados partieron de madrugada desde la Plaza de Toros de Las Ventas para llegar a primera hora a la finca Monteviejo. Allí fueron recibidos por Pilar Martín, quien, tras el desayuno, guió a los visitantes por el museo que recoge la historia y los grandes triunfos de la ganadería. Después, el grupo se desplazó hasta
la finca Las Tiesas de Santa María. En este escenario tuvo lugar la prueba de bravura: un tentadero en el que participó Ginés Marín, uno de los toreros que lidiará este hierro en la próxima Feria de Otoño. Incluso el propioVictorino Martínse animó a tomar la muleta. Será el sábado 11 de octubre cuando los toros de la A coronada volverán a ser protagonistas en Las Ventas, en un cartel en el que junto a Ginés también están anunciados Román y David Galván. El recorrido por los cercados permitió a los abonados contemplar de cerca a los toros en su hábitat natural y conocer de primera mano su crianza, historia y selección. Una cata de vino blanco y aceite de la casa, y una comida con la carne de toro como protagonista, pusieron el broche final a una jornada tan didáctica como emotiva.
Escanea este código QR y visualiza el vídeo completo de la visita realizada por los abonados.
Por DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN
VICTORINO MARTÍN:
“El cartel tiene todos los ingredientes necesarios para que sea una gran tarde de toros”
Victorino Martín es, sin duda, una de las ganaderías predilectas de la afición venteña. Aquí ha conseguido todo. Innumerables son los triunfos y alegrías desde su debut en esta plaza, no habría páginas suficientes en esta revista para contar la historia del hierro de la A coronada en Madrid, con la guinda en la pasada corrida In Memoriam de Victorino Martín Andrés el pasado 15 de junio en la que saltó al ruedo, entre otros toros importantes, ‘Milhijas’, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre y lidiado por Borja Jiménez en sexto lugar, con el que consiguió descerrajar la Puerta Grande tras una impecable faena. Un año, este 2025, importante para esta casa, por supuesto también
en Madrid, con esta temporada In Memoriam de Victorino Martín Andrés en homenaje a su persona. Por todo esto, la cita de otoño se convierte en una de las más esperadas del año, para Victorino, y para la afición.
“Madrid es nuestra plaza. Nosotros hemos salido de Madrid y pues ahora a tocar madera para que siga esta buena racha de corridas importantes en Madrid, que creo que así está siendo. Vamos con toda la ilusión del mundo y vamos a ver si salen bien las cosas porque es nuestra plaza y donde nos gusta triunfar”, dice Victorino Martín.
Una pregunta clásica, pero obligada… ¿Cómo es la corrida de toros reseñada para otoño?
Pues una corrida de toros, que diría mi padre, jajaja. Es una corrida pareja, muy honda y muy seria. Más de la mitad de la corrida es cinqueña y bueno, nos gusta mucho por tanto vamos cargados de ilusión.
Un cartel atractivo, novedoso, de los que apetecen. David Galván, Román y Ginés Marín con toros de Victorino Martín. Sí, es un cartel inédito, creo que no han toreado juntos los tres nunca y bueno es un cartel atractivo, veremos que pasa, pero tiene todos los ingredientes para que sea una gran tarde de toros. Ojalá.
Por DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN
GINÉS MARÍN:
“Estar en Madrid con la corrida de Victorino Martín es un gran reto”
Ginés Marín regresa a Las Ventas esta Feria de Otoño tras un destacado paso por San Isidro. Fue la tarde del 11 de mayo con toros de Fuente Ymbro en un cartel que completaron Miguel Ángel Perera y Paco Ureña. Aunque sin trofeos, dio una vuelta al ruedo tras la lidia del sexto como premio a una importante tarde. Tras su doctorado en Nimes en mayo de 2016, apadrinado por Morante de la Puebla y David Mora, Ginés Marín confirmó alternativa en Las Ventas en la Feria de San Isidro de 2017. En esta ocasión, El Juli ejerció de padrino y Álvaro Lorenzo de testigo. Fue esta cita su primer gran golpe en la mesa en Madrid, pues paseó las dos orejas del sexto de Alcurrucén y abrió la Puerta Grande. El 12 de octubre de 2021 volvió a conseguir este hito tras lidiar a ‘Secretario’, también del hierro de Alcurrucén, al que desorejó.
“La verdad que estoy muy ilusionado con este compromiso tan importante. Estar en Madrid con la corrida de Victorino Martín es muy
ilusionante para mí y, sin duda, un gran reto”, dice Ginés Marín al preguntarle por esta cita marcada en rojo en su calendario 2025.
Un cartel, el del sábado 11 de octubre, en el que se anuncian dos compañeros, David Galván y Román, que hacen que sea una cita de grandes alicientes e interés para el aficionado.
Yo creo que sí. Es un cartel joven y que ilusiona, sobre todo por vernos con una corrida que no es habitual, al menos en mi caso, el haberla matado antes, y bueno estoy seguro que pasarán cosas bonitas y para ello nos estamos preparando.
Vimos a Ginés también en Albacete acartelado con toros de la A coronada, ¿en qué se diferencia el toro de Victorino Martín de otro?
Es un toro muy particular, no solo por el encaste sino por la propia definición de la ganadería. Tiene muchos matices que hay que entender y conocer y bueno, creo que estos
tentaderos aquí en el campo, como el de hoy con los abonados de Madrid, me sirven mucho para conocer más la ganadería y para llegar a este esperado compromiso con ese oficio que requiere matar una corrida de Victorino. La del otro día de Albacete fue una tarde en la que me sentí muy bien y me da mucha moral para afrontar la corrida del día 11 de octubre con la mayor de las ilusiones.
¿Qué es para Ginés Las Ventas?
Es todo. Madrid, Las Ventas, es todo en el toreo y en mi carrera, gran parte. Mi futuro siempre me lo he solucionado en esta plaza y la afición de Madrid es la que me ha hecho mejor torero y me ha lanzado a las ferias. Es la que me ha dado un lugar importante en el toreo y estoy muy agradecido, pues siempre me han tratado con mucho cariño y respeto y a pesar de lo exigente y duro que es torear en Madrid, me siento querido y respetado y eso es para mi lo más importante.
Nació en Las Navas del Marqués en el 2000 y este 12 de octubre de 2025 cumple el sueño de confirmar su alternativa en la Monumental de Las Ventas. El sueño de todos los que algún día se apuntaron a una escuela taurina queriendo ser toreros. Será en uno de los carteles más esperados e importantes de esta presente temporada: Morante de la Puebla, Fernando Robleño, que se despide de los ruedos, y Sergio Rodríguez con toros de Garcigrande el Día de la Hispanidad. Casi ná. Ahora se entiende mucho mejor lo de ser “un sueño”.
SERGIO RODRÍGUEZ
“La Copa Chenel ha sido el trampolín que necesitaba para poder comenzar a cumplir sueños”
Y el mérito de estar presente en este cartel está ganado a pulso, porque Sergio Rodríguez, a pesar de su juventud y su corta carrera como matador de toros, ha sido el triunfador de la Copa Chenel 2025, certamen que le ha traído hasta aquí. Tras dos buenas clasificatorias en San Agustín del Guadalix y Algete, estuvo presente en la semifinal celebrada en Moralzarzal. Un destacado paseíllo que le llevó directo a la primera final a tres, y tras el resultado de esta, a la gran final mano a mano, ambas celebradas en Valdetorres de Jarama, localidad en la que alzó la Copa de triunfador.
Tomó la alternativa el 27 de abril de 2024 en su Ávila natal. Miguel Ángel Perera fue su padrino y Daniel Luque ejerció de testigo con toros de Monte la Ermita. Un triunfo de tres orejas que sirvió para seguir en boca de los aficionados. Antes, de novillero con picadores, trenzó el paseíllo hasta en tres ocasiones en esta plaza. Dos en la temporada de 2023, y otro unos días antes de su doctorado. Éste último fue el más destacado, pues cuajó a un novillo muy serio de
Los Chospes y solo el fallo con el acero le privó del triunfo. Ahí, también, se posicionó en buen lugar entre los aficionados por su concepto, pero ya venía de antes…
Previo a esta importante cita, hablamos en Las Ventas con el torero abulense, que nos cuenta, con gesto comprometido, la responsabilidad y las ganas con las que afronta esta tarde.
“Es un sueño que todo torero tiene. Confirmar en Madrid y además dentro de una Feria de Otoño de categoría y acompañado de dos maestros, como Morante y Robleño, un torero tan querido en Madrid, es para sentirse un privilegiado”, comenta Sergio.
Un momento clave en la carrera de un torero, ¿cómo te imaginas ese día? ¿Cómo es en tus sueños?
Puestos a soñar uno siempre se imagina triunfando, que todo sale como lo tienes soñado y planteado en la cabeza y, sobre todo, como entreno todos los días. También disfrutando del día, que no va a ser nada fácil por la presión, la plaza llena, un
día clave que puede cambiar el devenir de mi carrera y de mi vida… y, además, poder mostrarme como soy y que Madrid me vea en plenitud.
Un devenir en tu carrera que este año arrancó en parte por ganar esa ansiada Copa Chenel…
Sí, la Copa ha sido el trampolín que necesitaba y me ha dado la oportunidad de cumplir este sueño. Estoy muy agradecido, porque todo lo que tengo hoy día, sea mucho o poco, es gracias a la Copa que ha sido la que ha conseguido mostrarme en el escaparate taurino.
"Me
siento un privilegiado por poder confirmar alternativa en la Feria de Otoño con dos grandes maestros "
Conociendo un poco más a Sergio Rodríguez… ¿En qué momento piensas que quieres ser torero?
Todo ha sido un proceso natural. Yo empecé como aficionado práctico en mi pueblo entrenando una vez a la semana, nos juntábamos un grupo de 10-15 personas, y yo empecé pues jugando al toro sin tomármelo en serio porque tampoco quería ser torero, simplemente quería aprender un poquito, tener conocimiento sobre la tauromaquia, aprender a coger los trastos… Yo tenía 12 años. Con unos 16 es verdad que decido dar el paso de apuntarme a una escuela de profesionales, empiezo a tomármelo más en serio, a entrenar más de seguido, a hacer mis primeros tentaderos en el campo, y bueno, hoy día, echando la vista atrás, han pasado muchas cosas, poco a poco he ido cumpliendo sueños y ahora me encuentro aquí como matador de toros, ganador de la Copa Chenel y a punto de confirmar alternativa en Madrid.
Todo empezó como un juego de niños, poco a poco se fue convirtiendo en algo más serio, casi quizás sin pensarlo, en todo este camino, habrás tenido que renunciar a muchas cosas…
A bastantes. La verdad que cuando uno decide ser torero y se compromete al cien por cien con
la profesión, pues prácticamente renuncias a tu adolescencia. Ser torero implica muchas cosas, mucho sacrificio, y tienes que dejar atrás muchas cosas que otro chaval normal pues no tiene que hacerlo. Pero me siento orgulloso, me ha servido mucho para madurar, para crecer como persona, y estaría dispuesto una y mil veces a renunciar a todo lo que he renunciado por el toreo.
Seguro que hay alguna persona clave en ese proceso de crecimiento que apostó por ti desde un primer momento y fue tu principal apoyo. He tenido la suerte de que mi principal apoyo siempre ha sido mi familia. Siempre los he tenido muy cerca, en especial a mi padre y a mi abuelo, que falleció con el Covid, y fueron las dos primeras personas que me inculcaron un poco de lo que iba el tema y pues gracias a ellos hoy estoy aquí. Es cierto que en el camino que he recorrido como novillero pues también he tenido personas que han sido claves. Actualmente me apodera el maestro Leandro y Manuel Canorea, que creo que han venido en un momento muy importante para mi carrera y me van a aportar grandes cosas.
Y cuando Sergio se quita el traje de luces, ¿cómo es?
Intento ser una persona normal
"Tengo el primer escalón aquí en Madrid el día 12 para poder empezar a subir la escalera "
y corriente. Una persona sencilla, humilde, pero muy tímida.
¿Qué hace Sergio Rodríguez en su tiempo libre?
Me paso todo el día entrenando y al final vivo por y para el toro. Es cierto que cuando tengo un rato para desconectar me gusta montar a caballo, pasar tiempo con mi familia…
Si echas la vista atrás, ¿cuál es la mayor lección que te ha dado esta profesión?
Sobre todo darle importancia a los pequeños detalles. Me ha enseñado que hay que aprovechar cada oportunidad por pequeña que sea porque cualquier momento puede cambiarte la vida.
Volviendo a lo más importante, confirmas alternativa con solo 24 años, una meta que ha llegado pronto. ¿Qué sueños te quedan por cumplir de aquí a 10 años?
De aquí a 10 años me gustaría ser figura del toreo. Sé que es un camino largo y un proceso que lleva mucho tiempo, pero bueno tenemos el primer escalón aquí en Madrid el día 12 para poder empezar a subir la escalera y Dios quiera que de aquí a 10 años pues cambien muchas cosas.
La Feria de Otoño en Las Ventas vuelve a hacer historia:
alcanza los 19.428 abonados y supera en 1.199 abonos las cifras de 2024
Plaza 1, empresa gestora de la Plaza de Toros de Las Ventas, ha cerrado la venta de abonos para la Feria de Otoño con 19.428 abonados, 1.199 más que el año pasado. Es el mejor registro de los últimos quince años y uno de los mejores de toda la historia de la plaza. El aumento de abonados de la Feria de Otoño a partir de la gestión de Plaza 1 ha sido de casi 4000 abonados totales más. Lo que supone un aumento porcentual de más de un 25% desde la temporada del año 2016. (Ver cuadro informativo adjunto por año)
Plaza 1 hubo de gestionar un año entero sin toros por la pandemia del COVID (2020) y otro más sin posibilidad de ofertar abonos a causa de las restricciones sanitarias (2021). Es decir, dos años sin poder sacar a la venta ningún tipo de abono. Un problema de fondo grave del que se salió en progresión creciente pasando de los 15.711 del 2022 a los 19.428 actuales.
Plaza 1 quiere agradecer a todos los abonados de temporada, de la Feria de San Isidro y de la Feria de Otoño su fidelidad con Las Ventas, que se traduce en su lealtad con la tauromaquia. Con su asistencia y la de todos los aficionados, Las Ventas se mantiene como el tercer recinto
de afluencia de público anual, tras el Bernabéu y el Riyadh Air Metropolitano. Este agradecimiento se hace extensivo a toreros, ganaderos y a otros profesionales; a veterinarios y equipos presidenciales, así como a la Comunidad de Madrid y su Centro de Asuntos Taurinos.
Plaza 1 rinde homenaje a las generaciones
que hicieron grande el toreo del maestro Paco Camino en el spot de la Feria de Otoño
Con un spot protagonizado por Lucía Vera -Luci, para sus vecinos y amigos-, Plaza 1 promociona la Feria de Otoño de Las Ventas rindiendo homenaje, en clave de respetuoso humor, al maestro Paco Camino y a los centenares de miles de aficionados de una generación que levantó al país y que puso a figuras del toreo camino de la gloria y la historia.
El video protagonizado por Luci representa a una abuela que dialoga sin filtros con Paco Camino -dirigiéndose a un retrato situado en su mesa camilla-, con la naturalidad de una generación que entrega el relevo de la afición del toreo a su nieta Carmen.
El diálogo-monólogo reflexiona sobre el paso del tiempo, el traslado hacia las nuevas generaciones del toreo a través de la convivencia de abuelos y nietos. Y la tolerancia y vigencia del toreo en las nuevas generaciones, guión del trabajo de Plaza 1 en Las Ventas.
La localización, idea, guión y producción final pertenece al Departamento de Comunicacion de Plaza 1.
Escanea este código y reproduce el spot en Instagram: