Quiero dar las gracias a los comisarios de arte italiano de la National Gallery de Londres y a otros expertos con los que he viajado en los últimos años, especialmente a Caroline Campbell, Dawson Carr, sir Gabriele Finaldi, Tom Henry, Joost Joustra, Xavier Salomon, Letizia Treves y Matthias Wivel. También me gustaría dar las gracias de forma especial a Elena Greer, Tracy Jones y Philippa Sitters; Elain McAlpine, Marc Valli, Aman Phull, Jane Cutter y Nikos Kotsopoulos; y a mi familia, Sophie, Billy y Eleanor.
Título original Italy: In the Footsteps of the Great Artists
Traducción Sergi Marcó Cuenca Revisión de la edición en lengua española Llorenç Esteve de Udaeta Historiador del Arte Coordinación de la edición en lengua española Cristina Rodríguez Fischer
I.S.B.N.: 978-84-10469-40-2 Depósito legal: B. 9252-2025 Impreso en China
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Nick Trend es historiador del arte y periodista. Como redactor jefe de cultura de la sección de viajes del Daily Telegraph, lleva casi tres décadas escribiendo sobre los tesoros artísticos del mundo y ha elaborado guías de muchos de los museos y colecciones de arte más importantes. También ha trabajado en el equipo de comisarios de la National Gallery de Londres, es licenciado en Literatura inglesa por la University of Cambridge y doctor en Historia del Arte por la University of East Anglia. C008047
EL ARTE DE VIAJAR
ITALIA
TRAS LAS HUELLAS DE LOS GRANDES ARTISTAS
MONTERCHI
Este pueblo, situado en lo alto de una colina, en la frontera entre la Toscana y Umbría, fue el lugar de nacimiento de la madre de Piero, y ahora es famoso por su Madonna del Parto [5], que, según cuenta la leyenda, pintó cuando visitó Monterchi tras la muerte de su madre en 1459. La imagen forma parte de una larga tradición, principalmente toscana, de representar a María embarazada y de pie, sola (aparte de los ángeles de apoyo). Estas Madonas eran —y, de hecho, siguen siendo— veneradas como imágenes devocionales por las mujeres embarazadas en particular.
El fresco se pintó originalmente para una iglesia situada en la ladera de una colina a las afueras de Monterchi —Santa Maria in Silvis— que tenía una antigua relación con ritos paganos de fertilidad. Destruida por un terremoto en 1785, fue reconstruida como Cappella di Santa Maria di Momentana. La parte central del fresco fue rescatada y ahora está instalada en un museo dedicado a ella. La parte superior y los laterales se han perdido, motivo por el cual lo que vemos es solo la parte central de la concepción original. Pero sobrevive más que suficiente para apreciar cuánta vida ha inyectado Piero a la imagen tradicional. Además de una declaración simbólica, la ha transformado en una representación naturalista de María: fíjese en los ojos cansados y en la mano izquierda que presiona la parte baja de su espalda para aliviar el peso de su embarazo.
PERUGIA
La gran explanada adoquinada de la Piazza IV Novembre, en el corazón de Perugia, es uno de los espacios públicos más antiguos de Italia, que se remonta a los etruscos, aunque los edificios que la rodean son esencialmente medievales y Piero los conoció muy bien. No sabemos con qué frecuencia fue a Perugia ni cuánto tiempo pudo quedarse, pero sí que uno de sus retablos más fascinantes fue realizado para un convento de esta ciudad hacia 1470 [6], y ahora se encuentra en la bellamente restaurada Galleria Nazionale dell’Umbria, en la tercera planta del Palazzo dei Priori.
El cuadro es un monumental retablo políptico, estructurado en torno a un pesado marco dorado. Las figuras centrales de la Virgen y el Niño están flanqueadas por cuatro santos, retratados sobre fondos dorados y situados sobre una predela de dos pisos. Parece un retroceso a la Madonna della Misericordia de Sansepolcro (véase página 60), iniciada veinticinco años antes, pero aunque las figuras están suspendidas en pan de oro, Piero crea una sensación de espacio real a su alrededor: los santos se superponen unos a otros y proyectan sombras en el suelo; María y el Niño están sentados en un trono en un sofisticado nicho arquitectónico.
Lo más notable de todo es que Piero llena todo el registro superior con un tour de force de la perspectiva: un espectacular claustro columnado, de diez columnas de profundidad, que se aleja en la distancia. Los capiteles y las basas están delineados con una gran precisión matemática. La Anunciación se inserta en este marco, en otro triunfo de la perspectiva: el pavimento de mármol rojo y blanco. El contraste de estilos puede deberse a que las monjas, que encargaron la obra, impusieron sus gustos conservadores, a los que Piero tuvo que adaptarse, o a que heredó una pintura iniciada por un artista anterior.
Siguiendo el rastro de Piero della Francesca
Tejados de Perugia
Santa Croce, Vinci
Da Vinci en Vinci
VINCI Y ANCHIANO
«Incapaz de resistir mi ansioso deseo y queriendo ver la gran multitud de las diversas y extrañas formas hechas por la naturaleza formativa, y tras haber vagado alguna distancia entre sombrías rocas, llegué a la entrada de una gran cueva, frente a la cual permanecí algún tiempo, asombrado e ignorante de tal cosa».
Este extracto de uno de los cuadernos de Leonardo es una fascinante visión de su curiosidad por el mundo natural y sus exploraciones juveniles en el campo donde creció. Experimentar ese paisaje es la razón para ir a Vinci, a unos 40 km al oeste de Florencia. Su padre, abogado en la ciudad, tenía una casa que probablemente estaba cerca de la parte superior de la via Roma, pero como Leonardo era un hijo ilegítimo, es posible que no naciera en la casa familiar. Una tradición, registrada por primera vez en 1845, dice que nació en una casa de campo, hoy conservada como museo, en la cercana Anchiano. Casi con seguridad fue bautizado en la Chiesa di Santa Croce de Vinci, en la misma pila sencilla que se conserva hoy en día. Vinci está situada en las laderas más bajas de las colinas que emergen del valle del Arno y llega hasta las alturas de la sierra de Montalbano. Los olivares y los castaños dan paso a los bosques y a los riscos y picos de piedra caliza. Es una parte de la Toscana maravillosamente pintoresca, y la primera obra que se conserva de Leonardo —un estudio a pluma y tinta de un paisaje toscano de 1473 [1], en la actualidad en las Gallerie degli Uffizi— capta el dramatismo del paisaje.
También hay muchas cuevas entre estas colinas de piedra caliza, pero los estudiosos obsesivos, decididos a encontrar los paisajes literales que sirvieron de fondo a sus cuadros más famosos, han tenido que lanzar la red más lejos. Recientemente, un arco del río en Romito di Laterina —cerca de Arezzo, al sureste de Florencia—, hoy en ruinas, ha sido reivindicado como modelo del puente que se ve a lo lejos detrás del hombro izquierdo de la Mona Lisa [2]. Por su parte, los peñascos rocosos de la cercana Balze del Valdarno se citan a menudo como la fuente del extraño y primitivo escenario de las dos pinturas de La Virgen de las rocas de la National Gallery de Londres [3] y del Louvre de París [4]. Lo más probable es que la fértil mente de Leonardo retuviera todo tipo de imágenes de su infancia en Vinci, que luego conjuró de diversas formas. Así pues, un paseo por la antigua strada verde que serpentea a lo largo de algo más de 3 km entre Vinci y Anchiano, y que seguramente utilizó el propio Leonardo, es una de las mejores maneras de hacerse una idea del paisaje que despertó su extraordinaria imaginación.
Accademia di Brera
Bérgamo
Milán
Cremona
Museo del Violino
Museo Civico Ala Ponzone
Pinacoteca dell’Accademia Carrara
Cattedrale di Sant’Agata
Museo Poldi Pezzoli
Castello Sforzesco
Brescia
Florencia
Siena
Cremona
Milán Bérgamo
Casa de Sofonisba Anguissola
Gallerie degli Uffizi
N
Florencia
Complesso Museale
Santa Maria della Scala
Brescia
Pinacoteca Tosio Martinengo
EL ARTE DE VIAJAR
ITALIA
TRAS LAS HUELLAS DE LOS GRANDES ARTISTAS
El arte de viajar rinde homenaje a los artistas más grandes del mundo y a las ciudades en las que vivieron y trabajaron. Observe las vistas a través de sus ojos. Vea cómo cobran vida sus obras maestras.
Retroceda en el tiempo hasta el corazón de las grandes ciudades italianas, con los artistas más queridos del país como guías. Conozca a Caravaggio callejeando por la Roma del siglo xvii. Diríjase a la Venecia del siglo xviii, donde Canaletto pinta postales de gran tamaño para los turistas, o a la Florencia medieval, donde encontrará a Giotto trabajando en la Cappella Bardi.
Este libro contiene 12 capítulos, 21 artistas y 23 destinos, con itinerarios que le llevarán por los puntos de interés cultural de Italia para contemplar sus mejores obras, ya sea de cerca y en persona, o desde la comodidad de su sillón. Escrito por un historiador del arte que también trabaja como escritor de viajes para uno de los principales diarios del Reino Unido, el libro cuenta con mapas especialmente encargados para cada capítulo, con encantadoras viñetas dibujadas a mano que le sumergirán en los mundos históricos de los artistas.
«Cuando Caravaggio llegó por primera vez a Roma en 1592, era la ciudad más rica y glamurosa de la tierra, y una de las más peligrosas...».