Discurso del Dr. Gustavo Jalkh en la ceremonia de posesión de 19 jueces para Manabí
Portoviejo, 15 de octubre de 2014 Muy buenos días con todos y con todas. Realmente siempre es una alegría venir a Manabí, estar aquí en Portoviejo y más aún con estas buenas noticias de la incorporación de nuevos jueces y juezas para la provincia. Y también por supuesto mantener diálogos con varios sectores, porque nos falta mucho por hacer y nuestra forma de trabajo es siempre conversar y construir agendas en común con los usuarios, con los abogados, con los jueces, con las autoridades locales; y eso es lo que venimos a hacer también el día de hoy. Compañeros vocales del Consejo de la Judicatura, abogado Néstor Arbito, abogada Karina Peralta, ingeniero Alejandro Subía, economista Andrea Bravo, Directora General del Consejo de la Judicatura; doctor Gustavo Arboleda, Director Provincial de Manabí del Consejo de la Judicatura; abogado Walter Falconí, Presidente de la Corte Provincial de Justicia de Manabí; doctor Vicente Párraga, Fiscal Provincial de Manabí; doctora Catalina Castro, Defensora Pública de la provincia; abogado Luis Andrade, Presidente del Colegio de Abogados de Manabí; Verónica Rodríguez, asambleísta por Manabí; alcaldes de los diferentes cantones de la provincia gracias por acompañarnos el día de hoy. Jueces y juezas de la Corte Provincial de Justicia, directoras, directores nacionales del Consejo de la Judicatura que nos acompañan el día de hoy, juezas y jueces que hoy día se han posesionado en sus funciones de manera oficial, señoras y señores representantes de los medios de comunicación, ciudadanas y ciudadanos. La justicia es la máxima expresión de la igualdad entre los seres humanos, su desnaturalización la más infame creación de privilegios. Esta es una consigna que nos hemos impuesto en el Consejo de la Judicatura, tener siempre presente este concepto: la igualdad entre todos es justicia. Si no hay igualdad no hay justicia, igualdad ante la ley, igualdad de oportunidades, ausencia absoluta de discriminación. Unos quieren controlar la justicia, justamente para procurarse privilegios, para que desaparezca esa igualdad. Otros trabajamos todos los días, y esa es la meta del Consejo de la Judicatura, para eliminar toda desigualdad, para que todos seamos atendidos con oportunidad, para que todos seamos atendidos con igualdad ante la ley. En el pasado la justicia sufrió mucho de capturas, justamente con el objetivo de favorecer a ciertos grupos. Nosotros trabajamos para liberarla y para que esté al servicio de todos y cada uno de nosotros, porque no debemos permitir que unos controlen la justicia en desmedro de otros, en desmedro del derecho, en desmedro de la verdad. Algunos piensan que ser abogados es ser un lobista que acude al despacho del juez para convencerlo privadamente de algo. Nosotros consideramos que a los jueces, a los representantes del pueblo que administran justicia hay que darles las condiciones de trabajo adecuadas para que puedan servir con oportunidad, y puedan recibir a los abogados y a las partes procesales de manera transparente y pública en audiencias públicas. Esa es la manera de administrar justicia delante del pueblo, con probidad, con conocimientos. Por eso estamos impulsado la oralidad procesal en todas las materias, como ya lo