hige 3-8

Page 1

Capítulo 8: Encuentro Inesperado. — Ja… — ¿Por qué hoy estas suspirando tanto? ¿Pasó algo? Como Asami que estaba a un lado mío sin nada que hacer habló de repente, me asustó y mis hombros se sacudieron un poco ante la sorpresa. — — — —

¿Eh? Nada de “¿Eh?”. Acabas de suspirar escandalosamente. Mentira, no fue así. Lo hiciste, ¿Fue algo inconsciente?

Asami, pareciendo molesta, echó su cabello por detrás de sus hombros, inclinó la cabeza y preguntó de nueva cuenta. — ¿Pasó algo? — No…. No sucedió nada… Mientras respondía recordaba lo que había sucedido ayer. Yoshida san regresó a casa después de haber comido afuera. Además, ya era muy tarde cuando lo hizo. En el mensaje que recibí cuando me avisó no venía el nombre de la persona que lo acompañaba por lo que cuando regresó se lo pregunté y él me contestó que era una antigua novia de cuando iba a la preparatoria. Cuando regresó a casa, después de disculparse sinceramente por no haber podido comer en casa, extrañamente, se dirigió al baño y se dio una ducha. Después de terminar de ducharse, se acostó en la cama distraído como si pensara en algo, después de algunos minutos de solo hacer eso; se durmió. Yoshida san cenó fuera repentinamente, regresó tarde a la casa y aparte se veía diferente a lo usual. Es algo bueno si se analizan las cosas una por una, pero cuando todo ocurre al mismo tiempo se piensan arbitrariamente demasiadas cosas. Como por ejemplo: ¿En verdad solo habrá comido? Y si no fue así ¿Qué más habrá hecho? El pensar en ello me preocupaba. — Bueno, no importa a donde fue y que hizo Yoshida, no me interpondré en sus asuntos. Le expliqué a Asami lo que había sucedido ayer y hasta lo extrañamente triste que me sentí. Durante ese momento ningún cliente visitó la tienda. Aunque básicamente no era una tienda de conveniencia que estuviera siempre abarrotada, hoy había más tiempo libre de lo normal. De repente, cuando me di cuenta de que no había reacción por parte de Asami quien estaba muy platicadora, le eché un vistazo y ella estaba viéndome con la boca abierta. — ¿Eh? ¿Qué pasa? — Sayu chan, aunque dices eso… Asami frunció el ceño y parecía que iba a decir algo. Casi al mismo tiempo que inclinaba la cabeza, se abrió la puerta de la oficina, e inesperadamente apareció el rostro de Yaguchi san. — Me tomé un descanso. Era claro que Yaguchi san se acababa de despertar, y dijo aquello sin fuerza mientras salía de la oficina.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.