Erich Daniel Luna Jacobs
2010). A pesar de ello, siguió siendo una organización política estratégica para gobernar. Cuando se dio esta disputa entre Cáceres y Píerola, los civilistas terminaron abandonando al primero para buscar pactar un acuerdo con el segundo. Esto resulta interesante e importante como hecho político, en la medida en que Piérola y los civilistas fueron acérrimos adversarios décadas antes, durante el gobierno del fundador del Partido Civil, Manuel Pardo (Paniagua 2009; McEvoy: 1994) y con ocasión del contrato Dreyfus. Esto Basadre lo había expresado también diciendo que en el Perú los enemigos políticos terminan muchas veces deviniendo aliados de uno (Basadre 2000). Para poder comprender los cambios normativos en lo que respecta a las leyes electorales es necesario primero empezar viendo los aspectos más relevantes y fundamentales sobre las elecciones que la Constitución vigente (la de 1860) establecía en dicha época. Luego se pasará a exponer ambas leyes, la de 1861 y la de 1892, con el fin de poder constatar sus semejanzas y diferencias principales. Solamente de esa forma podrá comprenderse mejor el interés de los demócratas por cambiar la ley electoral que estaba vigente en el momento de la insurrección de Piérola.
2.1. La Constitución Política del Perú del 10 de Noviembre de 1860 En lo que respecta a los aspectos jurídicos de nuestro trabajo, empezaremos realizando una presentación de los rasgos esenciales de la Constitución que estuvo vigente durante nuestro período de estudio (18951919). Si bien los aspectos jurídicos no son lo único a lo que debe prestar atención la ciencia política (como lo hizo en su momento el primer institucionalismo), si debe constituir un aspecto a ser tomado en consideración, como nos lo ha enseñado el neo-institucionalismo (Peters 2003). Veamos pues, cuál es la constitución a la que tenemos que hacer referencia. 54