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Capítulo 24: ¡Con Sieglinde!..................................................................................................Pp
from Hokuou Kizoku 2
Capítulo 24 %
¡Con Sieglinde!
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El día de hoy saldré con Sieg luego de mucho tiempo. Hace poco aprendí cómo hacer licores de uno de los amigos de mi suegro, así que le pregunté a Sieg si quería ir a comprar algunos ingredientes.
De acuerdo a mi suegra, el ejercicio moderado ayudaba a mejorar el estado de ánimo de una mujer embarazada. Sieg salía a dar paseos en el jardín o en el bosque cercano, pero era la primera vez que recorríamos las calles de esta forma.
Por la mañana el mercado estaba atestado con personas, así que nos dirigimos a una zona comercial que tuviera menos gente.
El clima de hoy era bueno. La brisa acariciaba las mejillas con gentileza, perfecto para dar un paseo.
—Oye.
—¿Qué pasa?
—Finalmente estamos a solas.
En los últimos días, no pude estar con Sieg. Así que era agradable poder estar con ella sin tener que estar atento a su familia.
Me encontraba caminando con una sonrisa floja mientras contemplaba a Sieg, hasta que me regañó y dijo que mirara al frente cuando caminara. Me disculpé y comencé a mirarla de reojo.
Aunque de camino tomamos un carruaje, nos bajamos un poco antes de la zona comercial para disfrutar de un paseo relajante.
Cuando llegamos, apenas estaban abriendo las tiendas de la zona comercial, así que no había muchas personas. Tenía la impresión que podríamos disfrutar de nuestro viaje de compras con calma, por eso caminamos mientras conversábamos.
—Compraremos ingredientes para hacer licor, ¿verdad?
—Así es. Aunque, también planeo comprar ingredientes para hacer comida preservada.
Hace poco aprendí la receta de una comida preservada llamada “salsa chutney” de un amigo de mi suegro. Es algo parecido a una jalea muy popular en el Medio Este. Se prepara al poner a hervir frutas y vegetales con especias. Su tiempo de vida es hasta tres meses y puede usarse como condimento para la sopa o untarla sobre el pan y comerse sola.
—Quisiera tratar de hacer salsa chutney de baya y cacahuate.
La salsa chutney de cacahuate que sirvieron para el desayuno estaba deliciosa, así que me gustaría tratar de hacerla.
Cuando llegamos a la calle alineada con varias tiendas, montañas de varias frutas y vegetales entraron en nuestro campo visual.
—¡Ah, Sieg, hay una fruta rara!
Me acerqué emocionado, pero el precio no era barato. La fruta pintoresca provenía del Sur de Europa, por eso su precio era relativamente alto.
El vendedor nos recomendó comprar kirsche9 que estaban en temporada. Las frutas redondas y rojas brillaban como piedras preciosas.
—Considerando ese color tan lindo, el licor de cereza también sabrá bien.
—Si estás hablando de cerezas, entonces estáel kirschwasser10 .
—Ah, eso que lleva el Schwarzwälder Kirschtorte11 .
El Kirschwasser es empleado en pasteles. Conocido como agua de cereza, si bien es transparente, también posee el sobrenombre de “licor ardiente” debido a su alto contenido de alcohol. Recuerdo que mis ojos se llenaron de lágrimas cuando probé un poco por curiosidad.
—Cierto, qué tal si horneamos un pastel.
A Sieg le gusta el pastel de cerezas y mis sobrinas también dijeron que preferían pasteles hechos a base de frutas frescas en lugar de frutas secas, así que pensé que sería una buena idea. Gracias a que las cerezas eran un producto local en temporada, estaban baratas. Compré una gran cantidad y les pedí que la entregaran en la mansión del Conde.
Además, recibimos dinero de mi suegro para cosas como bayas, hongos, frutas y vegetales, así que compré todas las cosas que me llamaron la atención. Luego de eso,
9 N. de la T. Kirsche: significa “cereza” en alemán. 10 N. de la T. Kirschwasser: así se llama el licor de cereza en alemán. 11 N. de la T. Schwarzwälder Kirschtorte: nombre en alemán para el pastel de selva negra, al menos así se le conoce en México.
nos dio un poco de hambre, por lo que fui a comprar un poco de currywurst de un puesto en el parque.
—¡Iré a comprar las bebidas! Puedes empezar a comer primero~.
El puesto de currywurst solo tenía cerveza. Como la gente de aquí tomaba eso como si fuera agua, no pensaron que fuera necesario tener algo más. Luego de caminar un poco, encontré un puesto que vendía jugo de fruta fría, asíque compré dos.
Mientras me apresuraba a regresar, alguien me habló.
—¿Le gustaría comprar algunas flores, señor?
Una mujer mayor vendiendo flores me llamó. Allí vi una brillante flor roja. Por lo visto, crecían en su jardín.
—A tu novia le fascinará si le regalas una.
—En ese caso, deme diez12 .
Como eran sorprendentemente baratas, terminé comprándolas en un impulso. La vendedora recortó los tallos elegantemente e hizo un ramo, dio el toque final atando un lazo alrededor.
Con un ramo en la mano, troté de regreso a la banca donde Sieg me esperaba.
—¡Gracias por esperarme!
—Ah, perdón por las molestias.
—No, esto no es nada~.
Le entregué el jugo que había comprado.
—Oh, no has comida nada, ¿me estabas esperando?
—Estaba viendo a los niños jugar.
Cerca de nosotros había niños pequeños gritando y jugando por todas partes. Cuando pensé que recibiría un nuevo integrante en la familia como esos niños, sentí algo cálido esparciéndose en mi corazón.
—Ya falta poco.
Me agaché frente a Sieg y hablé con nuestro bebé.
—Además.
12 N. de la T. Para los curiosos, regalar diez rosas rojas en el lenguaje de las flores, es una forma simple pero poderosa de decirle a una persona: “Eres perfecta”.
Aprovechando esta oportunidad, le entregué el ramo que había escondido en mi espalda.
—Estos son mis sentimientos por ti. Por favor, acéptalos.
Hablaba en serio, pero Sieg se rió.
—Sieg… —Pero, es como si me estuvieras proponiendo matrimonio.
Por alguna razón fue vergonzoso, así que me senté en la banca y abrí la cubierta de madera del jugo, le entregué una a Sieg y yo bebí el otro.
Mi estómago se quejó de que estaba hambriento cuando olí el aroma dulce. La salchicha con especias picantes, la currywurst se enfrió, pese a eso la comida de su tierra natal seguía siendo deliciosa. No se comparaba a la que comimos en el festival de mi país.
Los dos comimos en silencio. No me llené, pero tampoco sentía hambre.
Luego de eso, nos adentramos más en la ciudad.
—Aquí hay muchas carnicerías.
Me sorprendí por la cantidad de carnicerías sobre la calle. Incluso había varias alineadas en un solo lado de la calle.
—Como lo pensé, no hay ninguna carnicería que venda carne de reno.
—Así es.
Extrañaba un poco la carne de reno, así que eché un vistazo alrededor, pero ninguna tienda la vendía. Tenían carne de res y puerco, pero no había carne de animales que eran populares en los países del Norte de Europa.
—¿Te gustaría regresar pronto a la aldea, Sieg?
—Sí. ¿Qué hay de ti?
—Uum, buena pregunta. Me gusta mucho este lugar, pero estoy preocupado por mis padres, así que tenemos que regresar lo más pronto posible.
Estaba feliz de que a Sieg le gustara mi tierra natal, así que respondí con eso. El parque que estaba un poco abarrotado, ya no tenía tantas personas ya que era hora del almuerzo. Los niños que habían estado jugando frente a nosotros también regresaron a casa para comer.
Junto a mí, Sieg estaba disfrutando el olor de las rosas.
—Sieglinde.
—Dime.
—¿Sabes qué significado tienen las rosas rojas en el lenguaje de las flores?
—No.
Coloqué un brazo alrededor de los hombros de Sieg y me acerqué para susurrarle al oído.
—Te amo.
Cuando dije eso, las mejillas de Sieg también se tiñeroncon un tono rojo como el de las rosas.
Mientras amaba a mi esposa que estaba avergonzada, disfruté de la refrescante tarde a principios del verano.
❄❄❄
Cuando regresamos a casa, los vegetales y frutas que compramos de las tiendas ya habían sido entregadas. El mayordomo nos preguntó qué nos gustaría para almorzar, pero le dije que no había necesidad de preparar nada ya que quería cocinar con Sieg.
Mientras charlábamos, comenzamos a extrañar la vida en las tierras remotas, así que decidimos cocinar luego de mucho tiempo. Tomamos prestada una esquina de la cocina y nos pusimos manos a la obra.
—¡Hoy haremos sopa de reno! O al menos me gustaría decir eso, pero ya que no conseguimos carne de reno, prepararemos sopa de albóndigas de borrego.
—Entendido.
Usaremos carne de borrego, la cual es la última tendencia por aquí. Piqué en trocitos la carne con dos cuchillos. Mientras que Sieg pelaría los vegetales. En la olla había cebada, la cual había secado y pulverizado, hirviendo. El carnicero me dijo que si la mezclaba con las albóndigas añadía una textura única. Coloqué la carne molida y especias en un recipiente y la amasé hasta que se volvió pegajosa. Al final, añadí la cebada hervida y las moldeé en pequeñas esferas.
Mientras preparaba las albóndigas, Sieg añadió tubérculos y hierbas a una cazuela y las puso a hervir. Una vez hervidos, agregó pimientos y pequeños tomates para que también hirvieran. Por último, colocamos las albóndigas y las hervimos a fuego alto. Quité la grasa y herví la sopa hasta que tuviera un lindo tono rojo. Entonces, la “sopa de tomate con albóndigas de borrego y cebada” estaba lista.
Conseguí algo de pan para comer con la sopa.
Miré a Sieg mientras probaba un poco con su dedo. Gracias a su expresión, supe que estaba deliciosa.
—Realmente cocinas muy bien, Ritz.
—¿De verdad~?
Como me elogió, mis mejillas se aflojaron hasta formar una sonrisa boba. Me gustaría mirar a Sieg comer, pero siento que me volvería a reprender, así que decidí probar la sopa también.
Tal y como lo recomendó el carnicero, la albóndiga con la cebada poseía una textura que nunca antes había probado. La cebada le daba un toque chicloso. El tomate se había combinado bien con la sopa, acentuando el sabor de las albóndigas.
El tomate fresco y los pimientos de la sopa eran al mismo tiempo agrio y picante, dejándote con un indescriptible sabor después. Los tubérculos que estaban en temporada también sabían grandiosos.
Nos acabamos cerca de dos tazones cada uno, después de un largo tiempo comimos hasta quedar llenos.
—Por alguna razón tengo sueño.
—¿Qué tal si tomamos una siesta?
—¿En serio está bien que nos relajemos tanto?
—Está bien. Has trabajado bastante.
Acepté la hospitalidad de Sieg y pasamos el resto de la tarde descansando en la habitación.
El día de hoy, Sieg salió luego de mucho tiempo e incluso cocinamos juntos. Sin duda alguna, hoy fue un día muy satisfactorio.